Nuevo retraso en la ejecución de la reforma de la OU-105 a la altura del tanatorio. Las obras encargadas por la Xunta a la constructora Opain han vuelto a incumplir otro de los plazos anunciados por el Gobierno gallego, el segundo desde el arranque de los trabajos y la previsión es que todavía se prolonguen alrededor de un mes, explican fuentes de la Consellería de Infraestruturas.
Finales de marzo fue la fecha fijada hace unas semanas al trascender que la Xunta había concedido a la empresa encargada del proyecto una prórroga de dos meses respecto al plazo inicial que fijaban los pliegos, ocho meses que se cumplían a finales de enero y a los que no se ajustó Opain.
Pese a que ya se atisba la estructura de la nueva rotonda que canalizará el tráfico entre la OU-105 y la rúa Canizo, siguen activos los desvíos que se habilitaron para poder ejecutar esa glorieta el 2 de febrero, una medida anunciada con carácter provisional durante dos semanas pero que ha cumplido ya dos meses.
Ahora, desde Infraestruturas apuntan que el nuevo cronograma fija tres semanas para concluir los trabajos de puesta a punto de la calzada, “siempre que el tiempo lo permita”. Después, añaden las mismas fuentes, “solo quedaría pintar”, excusando el retraso “en la huelga de transportes y un ritmo de suministros todavía lento”.
Mientras tanto, al ser una vía clave en los accesos y salidas del Polígono de San Cibrao, es habitual que la situación provoque importantes quebraderos de cabeza a los conductores.
