El gobierno de la ciudad quita hierro a la anulación definitiva del urbanismo provisional y recuerda que la ley habilita soluciones
"No es una cosa que debamos magnificar, se pueden hacer muchas cosas". Es la opinión del responsable de Urbanismo del Concello de Ourense, José Cudeiro, sobre el panorama que se le abre a a la ciudad tras conocer que el Tribunal Supremo ha inadmitido el recurso de casación interpuesto junto a la Xunta contra la anulación de la ordenación provisional, dictaminada en octubre por el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia. Esto condena, definitivamente, al Concello a regirse por el Plan Xeral de Ordenación Municipal (PXOM) de 1986.
Con varios meses por delante para poder aprobar definitivamente el nuevo planeamiento –las previsiones más optimistas del gobierno municipal apuntan a noviembre–, surge la duda de cómo puede afectar a la ciudad este nuevo revés urbanístico y el futuro que pueden tener proyectos troncales para el desarrollo de Ourense como son, entre otros, el AVE, los equipamientos termales, sanitarios o comerciales, la mayoría proyectados, pero sin llegar nunca a convertirse en realidad.
"Lógicamente, todo esto genera parálisis porque no se podrán desarrollar ámbitos previstos", indica Cudeiro, aunque recuerda, sin embargo, que la legislación vigente contempla la posibilidad de redactar otra norma transitoria para determinados proyectos, mediante la ley de acompañamiento aprobada por la Xunta, o incluso realizar modificaciones puntuales en el planeamiento de 1986.
Desde el gobierno indican que, "por desgracia, no hay grandes proyectos en marcha", pero tranquilizan a aquellos que puedan tener interés en desarrollar iniciativas, como las que fueron incluidas en 2011 en la ordenación provisional recientemente anulada por no haberla expuesto al público: "La ley nos permite hacer cosas, el caso es que las haya".
Proyectos planteados
Por lo que respecta a la integración de la alta velocidad y el complejo intermodal en el barrio de A Ponte, desde el Concello de Ourense señalan que esta situación no les afecta, recordando que la estación y de su entorno se realizará mediante la denominada "ley exprés", aprobada por la Xunta, para desbloquear proyectos de marcado interés público. El objetivo es que antes de final de año toda la tramitación administrativa esté resuelta para licitar las obras.
Sí esperan por seguridad urbanística los proyectos comerciales de Eroski en a Farixa e Hipercor en la Finca Mariñamansa, ámbitos que caen con la anulación de la ordenación provisional y que deberían reiniciar todos los trámites urbanísticos de nuevo tras la aprobación del PXOM. En esta misma situación, también se encuentran los proyectos termales previstos en el Campo de Santiago y en el Campo de la Feria, que dependen también del traslado del matadero a Santa Cruz de Arrabaldo, también afectado por la sentencia.
El regreso al Plan Xeral de 1986 no impedirá tampoco llevar a cabo el proyecto de rehabilitación de la plaza de Abastos, que no se ve afectado, además, por la anulación del Plan Especial de As Burgas, una zona donde también está contemplado un hotel termal en la antigua prisión provincial. Al tener consideración de equipamiento público en el planeamiento, cualquier interesado en promoverlo no tendría problema.
