El urbanismo ha de estar pensado para el disfrute de los peatones y servir para fomentar el comercio local. Con esta premisa partió la primera jornada del IV encuentro de emprendedores 'Eduardo Barreiros', que concluye hoy. Las tres primeras ponencias, articuladas bajo la mesa redonda genérica de 'Urbanismo comercial', coincidieron en la necesidad de diseñar la ciudad con tres objetivos: hacerla característica frente a otras, potenciar el comercio de cercanía y pensarla para el disfrute de los ciudadanos.
El primero de los conferenciantes fue el economista Eduardo Pascual Buyé, que explicó la importancia de que cada localidad cree su propia marca, ilustrando sus palabras con ejemplos como los edificios de Gaudí en Barcelona. A Ourense le aconsejó que, además de buscar la funcionalidad, debe huir de convertirse en una ciudad 'clónica' y precisó que el urbanismo debe pasar por la creación de 'escenarios singulares que sorprendan'.
A Buyé le siguió la consultora del área de mercados de la empresa Mercasa, Sara González, que abordó uno de los temas de mayor actualidad en Ourense: las reformas de los mercados minoristas. Trabajadora de una empresa dedicada, en parte, a la reactivación de las plazas de abastos, González aportó durante su comparecencia las claves para hacer de este tipo de recintos puntos de referencia del comercio ciudadano. En primer lugar, habló de potenciar la calidad de los productos y la cercana atención al cliente como elementos fuertes de este tipo de mercados. Para ejemplificar su criterio, la ponente analizó casos como el de la plaza de abastos de Sabadell, remodelada por su empresa, que ha elevado el porcentaje de usuarios en términos considerables desde su reapertura.
El último en relacionar urbanismo y comercio fue el técnico del Consejo de Cámaras de la Comundiad Valenciana, Alejandro Gil. Con una intervención que concluyó en que ciudades como Nueva York ha podido hacerlo, Gil Andrés definió los entornos ideales como 'diversos, útiles, acogedores y bellos'. A su entender, son los parámetros que debiera seguir todo diseño urbano que pretenda 'la excelencia'. El espacio público, en palabras del técnico valenciano, debe 'llevar a la compra', y esta, 'al paseo'. Para alcanzar el objetivo la peatonalización es uno de los elementos clave que permitirán 'reactivar el comercio', aunque para ello son precisas medidas 'drásticas'.
Las tres ponencias se completaron con un turno de preguntas en el que los asistentes mostraron sus inquietudes respecto al ámbito local, puesto que todos los temas abordados están de plena actualidad en Ourense. La carencia de un plan urbanístico ha paralizado el diseño de la ciudad, aunque el desbloqueo del entorno de As Burgas permitirá ejecutar la remodelación de la plaza de abastos.
A Buyé le siguió la consultora del área de mercados de la empresa Mercasa, Sara González, que abordó uno de los temas de mayor actualidad en Ourense: las reformas de los mercados minoristas. Trabajadora de una empresa dedicada, en parte, a la reactivación de las plazas de abastos, González aportó durante su comparecencia las claves para hacer de este tipo de recintos puntos de referencia del comercio ciudadano. En primer lugar, habló de potenciar la calidad de los productos y la cercana atención al cliente como elementos fuertes de este tipo de mercados. Para ejemplificar su criterio, la ponente analizó casos como el de la plaza de abastos de Sabadell, remodelada por su empresa, que ha elevado el porcentaje de usuarios en términos considerables desde su reapertura.
El último en relacionar urbanismo y comercio fue el técnico del Consejo de Cámaras de la Comundiad Valenciana, Alejandro Gil. Con una intervención que concluyó en que ciudades como Nueva York ha podido hacerlo, Gil Andrés definió los entornos ideales como 'diversos, útiles, acogedores y bellos'. A su entender, son los parámetros que debiera seguir todo diseño urbano que pretenda 'la excelencia'. El espacio público, en palabras del técnico valenciano, debe 'llevar a la compra', y esta, 'al paseo'. Para alcanzar el objetivo la peatonalización es uno de los elementos clave que permitirán 'reactivar el comercio', aunque para ello son precisas medidas 'drásticas'.
Las tres ponencias se completaron con un turno de preguntas en el que los asistentes mostraron sus inquietudes respecto al ámbito local, puesto que todos los temas abordados están de plena actualidad en Ourense. La carencia de un plan urbanístico ha paralizado el diseño de la ciudad, aunque el desbloqueo del entorno de As Burgas permitirá ejecutar la remodelación de la plaza de abastos.
