La provincia tiene la tasa de actividad más baja de España y el desempleo se ceba en las capas sociales más sensibles
El cómputo total del empleo en Ourense durante el 2016 deja muchas zonas de sombra. En prácticamente todos los indicadores hay números rojos, según la Encuesta de Población Activa (EPA), que se dio a conocer y que recoge los datos a 31 de diciembre.
La provincia tenía al cierre del pasado ejercicio 25.700 desempleados, 1.000 más de los que tenía un año antes, con un factor agravante: la tasa de actividad sigue a la cola de España y la subida se identifica sobre todo en las capas de población más sensibles.
Entre los 20 y los 24 años hay 600 desempleados más, pero también sube en 900 personas en la franja de 50 a 54 años y suma 1.300 más entre los 55 y 59 años. También en el grupo de edad que acaba de llegar al empleo hay malos datos: 1.200 desempleados más entre los 30 y los 34 años. Por el contrario, hay 1.600 parados menos entre 35 a 39 años y 1.300 menos entre 45 y 49 años.
La tasa de paro sube un 0,4% en un año para situarse en el 19,2%, la mas alta de Galicia, cuya media es ahora del 16,29%. Tampoco son mejores las perspectivas para encontrar un puesto de trabajo ya que 10.300 ourensanos llevan dos años o más esperando por un empleo, aunque son 2.500 menos que el año anterior.
Otro de los talones de Aquiles de la provincia es su tasa de actividad, que está en el 48,45%, la más baja de España, lejos de la media gallega (53,3%) y española (58,95%), a pesar de que mejoró un 1,3% en el último ejercicio. La tasa de ocupación es ahora del 39,1% después de crecer un 0,7% en relación al último trimestre del 2015.
Tipos de empleo
La EPA revela también la calidad del empleo que se mantiene en la provincia, con una leve mejoría de la contratación indefinida. A finales del 2015 había 60.900 asalariados bajo contratación indefinida, 2.500 más de los que se contabilizaban a finales del 2016.
La franja de edad comprendida entre los 25 y los 54 años ha sido la más beneficiada en este sentido y la que menos, los jóvenes que se incorporan a trabajar entre los 16 y los 24 años. Para este grupo de edad los empresarios optan mayoritariamente por un contrato temporal, pero también con tendencia descendente desde los 21.600 del 2015 a los 20.000 del año siguiente.
La encuesta también identifica en la provincia 8.800 hogares en los que todos sus ocupantes están en el paro, con un incremento de 200 hogares en relación al cierre del 2015. En 81.800 viviendas todos sus moradores están trabajando, lo que supone un ligero repunte de 200 hogares frente a las cifras del último trimestre del 2015.
