Ourense prepara entre un mar de dudas la vuelta al cole más difícil

A falta de un mes para el inicio del curso 2020/2021, todavía son muchas las incertidumbres entre la comunidad educativa sobre cómo será la vuelta a las aulas tras la irrupción del covid. Más de 30.000 alumnos ourensanos están llamados a regresar a clase en un curso marcado por la pandemia. El protocolo elaborado por la Consellería de Educación estipula las pautas del día a día, centradas en acotar al máximo la transmisión del virus en los centros. Pero directores, padres y sindicatos señalan los flecos del documento y ponen el foco en las reducidas plantillas y en la falta de profesionales sanitarios en colegios e institutos. Entradas y salidas, recreos y comedores estarán supeditados al grupo de clase; el contacto con alumnos de otros grupos debe ser el mínimo posible. Habrá encuestas diarias, para informar del propio estado de salud –tanto de alumnos como profesores–, y los centros contarán con un equipo covid, formado por directores y profesores. La Consellería de Sanidade destaca el establecimiento de grupos de convivencia estable –hasta 25 personas por aula en Infantil y Primaria que podrán convivir sin mascarilla, pero aislados de otras aulas–, la distancia interpersonal de un metro dentro de la clase, el uso de mascarilla y la higiene como principales medidas de contención de la pandemia en los centros. En función del avance de la situación sanitaria, la Xunta advierte de posibles cambios sobre la marcha, por lo que el protocolo no es definitivo. Los centros deberán aprender a convivir bajo la amenaza constante de cierres, tanto de unidades sueltas como del recinto al completo, a medida que aparezcan casos positivos. Aunque la Xunta apuesta por la enseñanza presencial, exige que antes de que acabe septiembre toda la comunidad educativa conozca en profundidad las herramientas virtuales para no cortar el curso en caso de rebrotes. La visión de los centros Los directores de los colegios valoran positivamente el protocolo, que incluso tildan de "demasiado ambicioso", y señalan la necesidad de adaptarlo a la realidad de cada centro. La reducción de las ratios de alumnos por clase es complejo en muchos centros, tanto por el número de docentes como por los espacios disponibles. "Nosotros hemos hecho ratios más pequeñas en 1º de la ESO y 2ª de Bachillerato, para asegurar la presencialidad el mayor tiempo posible. En los pequeños, por la conciliación de las familias y en los mayores porque es un curso con mucha materia", apunta Carlos Ferreiro, director del IES Blanco Amor. La oferta curricular en Educación Secundaria Obligatoria (ESO) y Bachillerato se verá afectada, para reducir la interacción entre alumnos de distintas clases. "Tivemos que limitar as opcións. Ata o de agora nunha mesma clase podían coincidir rapaces de ata tres aulas distintas", explica Daniel Lorenzo, director del IES Otero Pedrayo. Los centros también apuntan la importancia de que las pautas de prevención continúen al salir del recinto. "Ou remamos todos xuntos ou é inviable, é preciso que os alumnos respecten tamén as medidas", destaca Óscar Rodríguez, director del CEIP Curros Enríquez de Celanova, que llama a la "tranquilidade" de las familias. "Con moito esforzo conseguimos rematar o terceiro trimestre do curso pasado, e agora toca traballar para que se pareza o máis posible a un ano normal", añade. Aún así, la incertidumbre será la gran protagonista del curso escolar. "Sería mucho más fácil si nos hubiésemos enfrentado a algo similar en el pasado. Tenemos que tener todo lo más atado posible, ante las cosas que puedan suceder", comenta Ferreiro. Las opiniones Carlos Ferreiro González (IES Carlos Casares (Viana): "Se temos un caso teremos que pechar dúas semanas" El director del IES Carlos Casares de Viana, Carlos Ferreiro, es claro: "Se temos un caso, teremos que pechar o centro dúas semanas. Por unha mesma aula pasan moitos dos profesores. Se teñen que estar en corentena, non podemos continuar coa actividade lectiva". El director valora positivamente el protocolo, pero reconoce: "É moi ambioso. No noso caso precisamos máis persoal, polo menos de limpeza, para cubrir as quendas". Daniel Lorenzo (IES Otero Pedrayo (ciudad): "Os alumnos terán que estar na clase coa máscara posta" El equipo directivo del IES Otero Pedrayo adapta el protocolo del nuevo curso a su realidad. "Temos que marcar espacios distintos para o recreo, itinerario distinto de entrada e saída, limitar o número de optativas para que non coincidan tantos alumnos de clases distintas...", explica Daniel Lorenzo, director del centro. "Ter metro e medio entre alumnos é imposible, asi que terán que estar na clase coa máscara posta", apunta. Carlos Ferreiro García (IES Blanco Amor (ciudad) "Lo idóneo sería tener un enfermero en cada centro" Carlos Ferreiro, director del IES Blanco Amor, apunta ciertos "flecos" en el protocolo, y remarca la importancia de contar con profesionales sanitarios: "Lo idóneo sería tener un enfermero en cada centro. Es cierto que es caro, pero vale la pena si queremos hacer las cosas bien. No es fácil diferenciar los síntomas, y menos cuando llegue la gripe". También señala la dificultad de organización sin refuerzo de personal. José A. Álvarez Caride (FAPA Ourense): “Es inaceptable, en clase valdrá todo, es un suicidio colectivo" El protocolo es para el presidente de la federación de anpas de centros públicos "inaceptable", incluso "un suicidio colectivo". José Antonio Álvarez cree que quieren empezar "sí o sí" y sin "invertir ni un euro más". Critica que no haya ratios más pequeñas ni más profesores. También censura que no contasen con los padres para la vuelta. "De poco valdrá las medidas que haya en comedores o recreos si van a venir mal de clase". Borja Campos (CCOO Ensino): “Fan falta menos alumnos por aula e máis profesorado" Estuvo en la mesa de la que se levantaron los sindicatos. "Non se negociou nada", dice Borja Campos, responsable de salud laboral de CCOO-Ensino. "Non se reducen alumnos por aula e os centros serán foco de propagación. Moitos, antigos,e non están ben ventilados. Non hai desdobres nin máis profesorado, incluso recortan. Agora falan de burbullas, cando pecharon 10 colexios pequenosestes anos, como Paderne ou Xunqueira de Espadanedo".