Dicen que la verdadera belleza es tratar de mejorar lo que ya tienes. Parada de Sil y Allariz, dos de los pueblos ourensanos más ricos en paisaje y patrimonio, también pueden presumir de ser líderes en reciclaje de cartón, vidrio y envases por habitante en 2021, según datos facilitados por la Consellería de Medio Ambiente, Vivenda e Territorio. “Son un ejemplo de municipios colaboradores, con una ciudadanía muy implicada y que llevan la recogida de envases allá donde se producen, ya sea en los hogares o en los bares y restaurantes”, aseguró el gerente de Ecoembes en Galicia, Fernando Blázquez.
Los vecinos de Parada de Sil reciclaron el año pasado más de 73 kilos de plástico, papel y botellas por habitante, muy por encima de la media de la provincia, que se situó en casi 40 kilos. “Hay que tener en cuenta que se trata de una localización turística y probablemente algún establecimiento hostelero aporta mucho reciclaje de vidrio”, advierten fuentes de la consellería. De hecho, este ayuntamiento de la comarca de Terra de Caldelas, lidera la lista de reciclaje del contenedor verde, seguido por Leiro y Xunqueira de Espadañedo.
El segundo municipio de la provincia que más recicla es Allariz, que además encabeza el ránking de recuperación de envases, por delante de Arnoia y Carballeda de Avia. Y en cuanto al reciclaje de cartón y papel, ocupan los tres primeros puestos de la tabla O Barco de Valdeorras, A Rúa y Ourense.
En el otro lado de la balanza están los que necesitan mejorar. Chandrexa de Queixa, San Xoán de Río y Viana do Bolo son las tres localidades que menos kilos por vecino aportaron a los contenedores azules, verdes y amarillos. El primero apenas alcanzó los 15 kilos de residuos por habitante, el segundo no llegó a los 16 kilos y el tercero sumó solamente 17. “Estamos animándoles a que se sumen a las medidas que estamos emprendiendo desde la Xunta y Ecoembes para incrementar las tasas de recogida selectiva”, explica Blázquez.
En 2021, los vecinos de la provincia de Ourense reciclaron una media de casi 40 kilos de residuos por habitante, de los que 12,7 kilos fueron envases, 10,9 cartón y 15,9 vidrio. Una cifra que supone 6,6 kilos más que en 2017, una tendencia positiva y esperanzadora.
