El entorno del santuario de Os Milagros, que hace apenas días acogía a miles de personas, es hoy un vertedero al aire libre. Montañas de basura –televisores, neveras o sillas–se acumulan en los alrededores
La romería multitudinaria de Os Milagros ya se acabó, pero basta un paseo por el entorno para encontrar la huella de algunos visitantes. En los alrededores del santuario se amontonan sillas de plástico, bolsas, recipientes, mesas, restos de madera, tubos, maletas e, incluso, televisores, torres de ordenadores o neveras. La basura de este vertedero improvisado e ilegal se acumula, sobre todo, en el terreno que da acceso al recinto, que durante la celebración estuvo ocupado por multitud de puestos y caravanas.
El ecologista Xosé Santos se lamenta de la situación, cindo días después de terminar la novena: "Hai todo tipo de lixo na contorna, é unha auténtica porcallada", Xaime Iglesias, alcalde de Baños de Molgas, recuerda que la responsabilidad es de la empresa que gestiona la fiesta y de la mancomunidad de montes: "Estamos dándolle unha pequena marxe".
