La detención de Manuel Mouriño Farria como presunto autor de la muerte de la joven de Viana, Montserrat Martínez en abril del año 2001, estuvo presente ayer en varias ocasiones en la toma de posesión del nuevo teniente coronel de la Comandancia de Ourense, José Francisco Martínez.
El acto tuvo lugar en el salón del trono de la Subdelegación del Gobierno y las numerosas autoridades políticas y mandos de la Guardia Civil que arroparon a Martínez García, se deshicieron en felicitaciones a la Guardia Civil por el esclarecimiento del crimen, que conmocionó a la provincia y mantuvo en vilo durante nueve años a la población de Viana. 'Quiero manifestar públicamente mi reconocimiento a la Guardia Civil de esta provincia por los resultados del crimen de Viana. La investigación callada e implacable ha dado frutos', aseguró el delegado del Gobierno en Galicia, Antón Louro.
A la toma de posesión también acudió el general de la Guardia Civil en Galicia, Manuel Ferreiro, pero, al igual que el delegado del Gobierno, declinaron hablar sobre la investigación realizada, si los agentes continúan con las pesquisas o si el presunto agresor, que permanece en la cárcel de Pereiro, contó con la colaboración de segundas personas. 'Vamos a ser prudentes y dejar a la Guardia Civil que continúe trabajando', aseguró Antón Louro.
Los mandatarios no se pronunciaron sobre la investigación pero, según pudo saber este periódico, la detención de dos vecinos de Viana (un hombre y una mujer que eran pareja en el 2001) se podría practicar en las próximas horas. De hecho, agentes de la Policía Judicial de Ourense ya se desplazaron a Bilbao, donde reside el hombre con el objetivo de recabar datos sobre la inminente detención.
La mujer reside en la ciudad de As Burgas y a ambos los situó Manuel Mouriño, durante su declaración en el Juzgado de Trives, en las proximidades del escenario del crímen, cerca del Consistorio vianés.
La pareja ya prestó declaración en el 2001 ante la Guardia Civil y entonces negaron estar en el lugar en la noche que desapareció Montserrat Martínez.
La Guardia Civil les hizo un seguimiento e intervino sus teléfonos y ya podría tener datos de que entonces pudieron haber mentido.
A la toma de posesión del nueve teniente coronel de Ourense acudió su antecesor, Benedicto González, en la actualidad coronel en A Coruña. González Delgado aterrizó en la Comandancia de Ourense al poco tiempo de ser hallada muerte Montserrat Martínez y le tocó dirigir la investigación, aunque abandonó la provincia sin llegar a ver resultados.
El coronel también declinó ayer hablar sobre el caso, cuya resolución entró en pista en el año 2008 cuando Manuel Mouriño fue denunciado por su compañera sentimental en la Comisaría de la Policía Nacional de Ibiza de un delito de malos tratos. En diciembre del 2008, el Juzgado de Instrucción número 4 de la citada localidad lo condenó a seis meses de cárcel y no acercarse a su compañera.
Acto seguido, la Guardia Civil comenzó a vigilarlo de cerca y le intervino su teléfono, llegando a comprobar que había quebrantado en varias ocasiones la orden de alejamiento y que había retomado la convivencia con la mujer.
La semana pasada, los agentes procedieron a su arresto después de escucharle decir a su pareja, durante una discusión telefónica, que podría matarla como ya habría con otra anterior. Según fuentes de la investigación, el presunto agresor, ante la presencia de los agentes, se derrumbó y confesó.
Violencia de género, drogas, e incendios
El general de la Guardia Civil en Galicia, Manuel Ferreiro, invitó al jefe de la Comandacia de Ourense a abrirse e integrarse en la sociedad. Asu entender, la criminalidad en la provincia es baja, pero los resultados siempre se deben 'mejorar sobre todo en materia de robos, violencia de género, narcotráfico e incendios forestales', aseguró.
Invitó a Martínez García a colaborar con el resto de fuerzas (Policía Nacional, Local y Autonómica) 'porque compartimos objetivos'.
Ourense, una de las ciudades más seguras
El delegado del Gobierno en Galicia dio la bienvenida ayer al nuevo teniente coronel de Ourense, recalcando que tiene al mando a 900 agentes repartidos en 35 cuarteles para garantizar la seguridad de 300.000 personas. 'Ourense es una provincia segura para vivir, una de las más seguras de España y Europa', afirmó, recalcando que la tasa de criminalidad se situó el año pasado en 20,9 delitos por cada 1.000 habitantes, siete puntos por debajo de la media gallega y 25 por debajo de la media española'. A su entender, el bajo índice de delitos es fruto del buen hacer de las fuerzas de seguridad. Louro Goyanes destacó que en los últimos años se incrementó en un 20% el número de guardias y se invirtieron cuatro millones de euros en mejoras de cuarteles.
A la toma de posesión también acudió el general de la Guardia Civil en Galicia, Manuel Ferreiro, pero, al igual que el delegado del Gobierno, declinaron hablar sobre la investigación realizada, si los agentes continúan con las pesquisas o si el presunto agresor, que permanece en la cárcel de Pereiro, contó con la colaboración de segundas personas. 'Vamos a ser prudentes y dejar a la Guardia Civil que continúe trabajando', aseguró Antón Louro.
Los mandatarios no se pronunciaron sobre la investigación pero, según pudo saber este periódico, la detención de dos vecinos de Viana (un hombre y una mujer que eran pareja en el 2001) se podría practicar en las próximas horas. De hecho, agentes de la Policía Judicial de Ourense ya se desplazaron a Bilbao, donde reside el hombre con el objetivo de recabar datos sobre la inminente detención.
La mujer reside en la ciudad de As Burgas y a ambos los situó Manuel Mouriño, durante su declaración en el Juzgado de Trives, en las proximidades del escenario del crímen, cerca del Consistorio vianés.
La pareja ya prestó declaración en el 2001 ante la Guardia Civil y entonces negaron estar en el lugar en la noche que desapareció Montserrat Martínez.
La Guardia Civil les hizo un seguimiento e intervino sus teléfonos y ya podría tener datos de que entonces pudieron haber mentido.
A la toma de posesión del nueve teniente coronel de Ourense acudió su antecesor, Benedicto González, en la actualidad coronel en A Coruña. González Delgado aterrizó en la Comandancia de Ourense al poco tiempo de ser hallada muerte Montserrat Martínez y le tocó dirigir la investigación, aunque abandonó la provincia sin llegar a ver resultados.
El coronel también declinó ayer hablar sobre el caso, cuya resolución entró en pista en el año 2008 cuando Manuel Mouriño fue denunciado por su compañera sentimental en la Comisaría de la Policía Nacional de Ibiza de un delito de malos tratos. En diciembre del 2008, el Juzgado de Instrucción número 4 de la citada localidad lo condenó a seis meses de cárcel y no acercarse a su compañera.
Acto seguido, la Guardia Civil comenzó a vigilarlo de cerca y le intervino su teléfono, llegando a comprobar que había quebrantado en varias ocasiones la orden de alejamiento y que había retomado la convivencia con la mujer.
La semana pasada, los agentes procedieron a su arresto después de escucharle decir a su pareja, durante una discusión telefónica, que podría matarla como ya habría con otra anterior. Según fuentes de la investigación, el presunto agresor, ante la presencia de los agentes, se derrumbó y confesó.
Violencia de género, drogas, e incendios
El general de la Guardia Civil en Galicia, Manuel Ferreiro, invitó al jefe de la Comandacia de Ourense a abrirse e integrarse en la sociedad. Asu entender, la criminalidad en la provincia es baja, pero los resultados siempre se deben 'mejorar sobre todo en materia de robos, violencia de género, narcotráfico e incendios forestales', aseguró.
Invitó a Martínez García a colaborar con el resto de fuerzas (Policía Nacional, Local y Autonómica) 'porque compartimos objetivos'.
Ourense, una de las ciudades más seguras
El delegado del Gobierno en Galicia dio la bienvenida ayer al nuevo teniente coronel de Ourense, recalcando que tiene al mando a 900 agentes repartidos en 35 cuarteles para garantizar la seguridad de 300.000 personas. 'Ourense es una provincia segura para vivir, una de las más seguras de España y Europa', afirmó, recalcando que la tasa de criminalidad se situó el año pasado en 20,9 delitos por cada 1.000 habitantes, siete puntos por debajo de la media gallega y 25 por debajo de la media española'. A su entender, el bajo índice de delitos es fruto del buen hacer de las fuerzas de seguridad. Louro Goyanes destacó que en los últimos años se incrementó en un 20% el número de guardias y se invirtieron cuatro millones de euros en mejoras de cuarteles.
