Un policía local que estaba de paisano detuvo a un hombre cuando estaba a punto de cometer un hurto en el Eroski de Seixalbo. Eran las 12,48 horas del mediodía del miércoles cuando el agente, que estaba realizando sus propias compras, visualizó a tres dependientes que salieron corriendo en busca de un hombre que se había ido con bolsas y sin pagar.
El hombre que estaba cometiendo el hurto presentaba gran nerviosismo pero no desistió de continuar su marcha. El policía habló con el encargado y decidió correr tras él. Lo interceptó a 500 metros del supermercado y lo retuvo. Trató de calmar al propio autor del hurto, para evitar que nadie resultase herido.
El valor de lo que llevaba en la bolsa resultó inferior a 400 euros, por lo que se trata de un delito de hurto leve. El implicado acudió a un juicio rápido, celebrado ayer en el juzgado de Instrucción número 3 de Ourense.
Los hurtos, como el ocurrido ayer, son uno de los tipos penales que más aumentaron en la provincia durante el pasado año, un 40%. En total se denunciaron 1.747. Fuentes policiales señalan que es habitual el perfil de adicto a las drogas, sobre todo los que acuden “por encargo”.
