La Consellería de Industria tiene en sus manos la creación de una gestora, mientras las deudas crecen
El goteo de dimisiones en el pleno de la Cámara de Comercio prosigue y pocos son los vocales que aún mantienen su puesto. Según el último recuento, no más de cuatro personas o entidades de las 30 que están en el pleno quedan en estos momentos por presentar la renuncia, según fuentes de la entidad. Mañana mismo se podría plasmar la firma en el escrito de dimisión de al menos dos de esas vocalías, con lo que el organismo cameral está prácticamente descabezado al hacerse efectivo el abandono de casi todas las empresas y entidades sentadas en el salón de plenos.
El día 27 de noviembre una sesión plenaria extraordinaria abordó la delicada situación económica de la entidad y se tomó el acuerdo de presentar la dimisión. No sería hasta el día siguiente cuando empezaron a firmarse los escritos de dimisión. Dos semanas después el proceso se da prácticamente por concluido.
La Consellería de Industria, órgano tutelante, ha recibido ya las dimisiones y en su mano está ahora la constitución de una junta gestora, con la intención de convocar nuevas elecciones y que la Cámara ourensana recupere su actividad. Pero este organismo de la Xunta aún no ha movido ficha, si bien se espera que tome una decisión en el transcurso de enero.
Deudas
Mientras, la situación de la Cámara de Comercio sigue languideciendo y su deuda aumentando. La carencia de recursos fue el motivo de la marcha de sus órganos de gobierno y la falta de entrada de dinero hará que la deuda no se consiga atajar. Paralelamente, los trabajadores han presentado reclamaciones judiciales porque se les adeudan ya cinco nóminas. Durante la semana entrante comenzarán las citaciones en los servicios de conciliación. n
