Dos acusados se enfrentan a un total de nueve años de prisión (seis para uno de ellos y tres para la otra) por un supuesto delito de tráfico de drogas. El hombre niega los hechos, al no habérsele hallado droga mientras que la mujer aseguró que la cocaína y heroína que le encontró la Policía eran para su propio consumo.
Fui condenado a tres años por tráfico y lo estoy cumpliendo ahora; me ofrecieron un trabajo en Pontevedra y no tengo nada que ver con esto. Así se exculpaba ayer ante el tribunal de la sección segunda de la Audiencia provincial Manuel Antonio F.R., ante el que comparecía acusado de tráfico de drogas. Junto a él se sentaba en el banquillo de los acusados Mónica L.P., procesada por los mismos hechos.
La causa contra los imputados se inició en julio de 2006, cuando la Policía Judicial comenzó un seguimiento de ambos. El 21 de agosto de ese mismo año, los agentes vieron a los acusados en la calle Pelayo de la ciudad, contactando con un grupo de personas. En ese momento fueron detenidos. El hombre llevaba consigo 660 euros en distintos billetes y la mujer, dos bolsitas con 1,6 gramos de cocaína y 0,9 gramos de heroína, respectivamente. Ya en Comisaría, en un cacheo a la acusada, la Policía encontró entre su ropa nueve envoltorios con ambas sustancias.
Argumentos
El fiscal considera que la droga era para la venta a terceras personas y que el dinero que llevaba el acusado era el fruto de ese comercio. Se basa para ello en que el hombre no tenía ingresos que justificasen la posesión de más de 600 euros. Sin embargo, la defensa niega este punto, asegurando que no existen indicios de delito, dado que no se le encontró cantidad de droga alguna. En cuanto a la acusada, sostiene que la sustancia estupefaciente era para su propio consumo. Por ello, reclama la libre absolución para ambos.
Mientras, la acusación pública solicita para el hombre una pena de seis años de cárcel y 1.000 euros de multa, al considerarlo reincidente en este tipo de delitos. Para la acusada reclama tres años de prisión y multa de 1.000 euros. Aplica la atenuante de drogadicción.
La causa contra los imputados se inició en julio de 2006, cuando la Policía Judicial comenzó un seguimiento de ambos. El 21 de agosto de ese mismo año, los agentes vieron a los acusados en la calle Pelayo de la ciudad, contactando con un grupo de personas. En ese momento fueron detenidos. El hombre llevaba consigo 660 euros en distintos billetes y la mujer, dos bolsitas con 1,6 gramos de cocaína y 0,9 gramos de heroína, respectivamente. Ya en Comisaría, en un cacheo a la acusada, la Policía encontró entre su ropa nueve envoltorios con ambas sustancias.
Argumentos
El fiscal considera que la droga era para la venta a terceras personas y que el dinero que llevaba el acusado era el fruto de ese comercio. Se basa para ello en que el hombre no tenía ingresos que justificasen la posesión de más de 600 euros. Sin embargo, la defensa niega este punto, asegurando que no existen indicios de delito, dado que no se le encontró cantidad de droga alguna. En cuanto a la acusada, sostiene que la sustancia estupefaciente era para su propio consumo. Por ello, reclama la libre absolución para ambos.
Mientras, la acusación pública solicita para el hombre una pena de seis años de cárcel y 1.000 euros de multa, al considerarlo reincidente en este tipo de delitos. Para la acusada reclama tres años de prisión y multa de 1.000 euros. Aplica la atenuante de drogadicción.
