Meteogalicia prevé acumulaciones de hasta 20 centímetros en zonas de alta montaña, el noroeste y el sur de Ourense
Cumpliendo con la previsión meteorológica, la nieve hizo acto de presencia en la provincia, pero su llegada se demoró. Las acumulaciones importantes se esperaban para la pasada madrugada, aunque ya por la tarde los copos cuajados comenzaron a hacer acto de presencia en las zonas más altas de las zonas sur y oriental. Con todo, durante la jornada no se registraron incidencias en las carreteras.
La provincia quedó desde ayer bajo la influencia de una borrasca que se mueve por el Cantábrico acercando aire polar marítimo. Por esta razón, desde el mediodía estuvo activado el nivel de aviso amarillo en casi toda la provincia, que pasó al umbral naranja por la tarde en el noroeste, sur y zonas de alta montaña, según la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), por riesgo de acumulaciones de nieve superiores a los 20 centímetros en la montaña y de siete en el resto.
Ante esta situación, y con el fin de garantizar la seguridad de bienes y personas, el Centro de Atención a Emergencias 112-Galicia puso en alerta a todos los concellos de las zonas afectadas, bomberos, diputaciones y servicios de Protección Civil, entre otros.
La cota de nieve se situó a primera hora en los 1.000 metros. De hecho, según informaron desde Meteogalicia, en Manzaneda comenzó a nevar por la mañana. Fue descendiendo hasta los 400 metros a lo largo del día, llegando a acumularse, ya por la noche, hasta siete centímetros en zonas más bajas. El Alto do Rodicio o la comarca de O Bolo quedaron ya cubiertas por la tarde. Alertaron desde Meteogalicia de que las comarcas de A Limia y Celanova también se presentaban como uno de los puntos más conflictivos, especialmente a partir de las 21,00 horas.
La situación obligó a la Delegación del Gobierno en Galicia a activar el plan de viabilidad invernal en la red de carreteras en la provincia, a la que se unieron Lugo y Pontevedra -también en con avisos naranja y amarilla, respectivamente-. Así, y aunque el tráfico rodado no sufrió problemas para circular, de acuerdo con el protocolo de coordinación de actuaciones, fueron movilizados todos los recursos disponibles en Galicia para neutralizar los efectos del temporal para "garantizar la máxima fluidez posible del tráfico manteniendo las infraestructuras de transporte en condiciones de uso", informaron.
Precisamente, para hacer frente a los posibles efectos de esta climatología adversa, la Xunta de Galicia tiene previstos 25 centros operativos, 72 vehículos, 5.700 toneladas de fundentes y un equipo humano de 450 personas, para velar por el mantenimiento de los 5.500 kilómetros de carreteras autonómicas.
La masa de aire polar marítima que se mueve por el Cantábrico prolongará el nivel de alerta naranja hasta la media tarde de hoy. Avanzaron desde Meteogalicia que el tiempo también será inestable, con chubascos intermitentes y nieve a partir de los 600 metros, una cota que irá en ascenso a medida que avance el día, hasta situarse de nuevo en los 1.000 al final de la jornada.
La temperaturas máximas no llegarán a los diez grados y las mínimas se acercarán a los cero. Para el domingo, las temperaturas experimentarán un ligero ascenso en los valores mínimos.
