CIUDAD

Sin rastro de serpientes tras registrar el bajo abandonado

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photo_camera Bajo de avenida de Portugal de donde se supone que salen las serpientes que atemorizan al vecindario.

El administrador de la finca lo revisó mientras los vecinos insisten en que el Concello debe actuar

El presidente de la comunidad de vecinos del número 160 de la avenida de Portugal, Eduardo Jones, acudió ayer a la oficina de atención al ciudadano del Concello de Ourense para urgir "al departamento que corresponda a resolver el problema de la proliferación de serpientes que estamos padeciendo en los últimos días". Jones reconoce que ayer no se vio ninguna, pero sí pudo fotografiar una el pasado domingo, cuando se retiraba al bajo abandonado desde hace años y que en su día ocupó un supermercado.

De hecho, a primera hora de la tarde de ayer se acercaba al lugar el administrador de este bajo, Pablo Rodríguez, de Inmobiliarias Sindo que, junto con un par de técnicos, revisó el interior del local vacío sin encontrar "rastro alguno de serpientes", señaló.

Rodríguez apunta, en todo caso, que "pudieron entrar por algún hueco desde la parte trasera, donde hay unas huertas" que en los últimos tiempos parecen estar ligadas a la sucesiva aparición de humedades en este bajo. El local es propiedad de un vecino de Avión con familia en México "y que vendrá este verano", según explicó el administrador, que considera que "las serpientes salieron por aquí como podrían haberlo hecho 100 metros más allá". Los vecinos están de acuerdo con esta afirmación y señalan que es el Concello el que debe solucionar el problema que, temen, se reproduzca "en cuanto vuelva de nuevo el calor, provocando un susto o vaya uno a saber si algo más", señala Jones.

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