La escisión de Máis Galiza del BNG y su voluntad de crear una nueva formación política ya tiene una primera y cualificada baja, la de Xosé Carballido Presas, que ha abandonado el Bloque y, además, renunció a seguir de director xeral de Rehabilitación en la ciudad, un cargo al que había accedido en virtud de su afiliación nacionalista.
Ya lo había anunciado pero ayer insistía en que su marcha -que formalizó por escrito ante el concejal del ramo, Fernando Varela, y después lo comunicó a las otras dos concejalas, Isabel Pérez y Marta Arribas, así como al alcalde- no es sino un ejercicio de 'coherencia', para no seguir en el puesto de confianza por un partido que ya no es el suyo. Carballido seguirá todavía unos días en el cargo pero volverá a su actividad laboral en la Administración, aunque es ya uno de los dos ourensanos -con Ana Benito Galán- que forman parte del nuevo consello nacional de Máis Galiza.
Pero la clave para Máis Galiza es ahora conocer cuántos de sus militantes y cargos optan por abandonar la formación frentista y se integran en el nuevo partido. Tanto Carballido como el exsenador Xosé Manuel Pérez Bouza reconocen que es demasiado pronto, pero el segundo calcula que, a juzgar por el resultado de la asamblea del domingo, puede que un tercio de Máis Galiza quede en el BNG y dos tercios abandonen la formación, bien para sumarse al nuevo partido o para abandonar la militancia.
EL REPARTO DE FUERZAS
En la ciudad, las fuerzas están muy igualadas, también en la provincia, pero en cuestión de cargos institucionales, la UPG -o APU, Alternativa pola Unidade- siempre estuvo en minoría en Ourense, aunque controlase los hilos de la formación. De los 112 concejales que tiene ahora el BNG, unos 80 son afines o cercanos a Máis Galiza y la UPG contaría con unos 20; el resto son independientes, están en otras corrientes o son simplemente militantes del BNG.
Por lo que se refiere a parlamentarios autonómicos, no habrá 'fugas', ya que los dos ourensanos, Suárez Canal y Tereixa Paz, son miembros de UPG; también Leopoldo Rodríguez, diputado provincial, está más cerca de esa 'sensibilidad', no así el otro diputado y alcalde de Vilar de Santos, Xan Jardón que, con todo, no ha decidido la salida del BNG, como tampoco lo hizo, de momento, Teresa Barge, regidora de A Bola. Xurxo Rodríguez, alcalde de Castrelo de Miño, vinculará su decisión a la de su grupo municipal y de la asamblea local, no así Rafael Pérez, alcalde de A Mezquita, que precisó ayer que, aún siendo miembro de Máis Galiza, prefiere quedarse en el Bloque. 'Esta sensibilidade foi creada coa intención de cambiar a formación dende dentro, creo que falando aínda nos podemos entender', precisó.
En realidad, la salida del BNG no es tan fácil para los alcaldes y sus concejales porque, recuerdan Carballido o Bouza, pueden no ser todos de la misma corriente, y una marcha del regidor o de algún concejal puede hacer saltar por los aires algún gobierno municipal.
Mientras, a tan sólo un día después de la escisión, Carballido llama hacia el nuevo partido tanto al PNG como a otros cargos -Bouza, Jardón, Xurxo Rodríguez, ...- que ya están dando pasos en esa dirección porque 'hai espazo para unha segunda opción nacionalista'. Y Pérez Bouza, que ya está fuera del Bloque, espera que sea posible articular un nuevo proyecto más allá de que se unan todos los descontentos con el BNG. En mes y medio, augura, 'saberemos se hai unha nova forza solvente' en el ámbito del nacionalismo gallego.
LOS ALCALDES NACIONALISTAS
Francisco García: El de Allariz es el único regidor de la UPG en Ourense, no así todos sus concejales.
Teresa Barge: Independiente, la alcaldesa de A Bola no definió su postura ni se ha postulado.
Xurxo Rodríguez: El regidor de Castrelo de Miño vincula su decisión a la de su grupo municipal.
Rafael Pérez: El alcalde de A Mezquita es de Máis Galiza, pero se quedará en el Bloque.
Xan Jardón: El alcalde de Vilar de Santos mantiene la incógnita sobre su futuro en el BNG.
Isabel Pérez: La teniente alcalde de Ourense, militante de la UPG, seguirá en el Bloque.
Xabier Oviedo: El alcalde de Maceda fue el primero en salir del BNG con todo su grupo municipal.
David Rodríguez: El alcalde de Manzaneda también se dio de baja en el Bloque, con sus ediles.
Pero la clave para Máis Galiza es ahora conocer cuántos de sus militantes y cargos optan por abandonar la formación frentista y se integran en el nuevo partido. Tanto Carballido como el exsenador Xosé Manuel Pérez Bouza reconocen que es demasiado pronto, pero el segundo calcula que, a juzgar por el resultado de la asamblea del domingo, puede que un tercio de Máis Galiza quede en el BNG y dos tercios abandonen la formación, bien para sumarse al nuevo partido o para abandonar la militancia.
EL REPARTO DE FUERZAS
En la ciudad, las fuerzas están muy igualadas, también en la provincia, pero en cuestión de cargos institucionales, la UPG -o APU, Alternativa pola Unidade- siempre estuvo en minoría en Ourense, aunque controlase los hilos de la formación. De los 112 concejales que tiene ahora el BNG, unos 80 son afines o cercanos a Máis Galiza y la UPG contaría con unos 20; el resto son independientes, están en otras corrientes o son simplemente militantes del BNG.
Por lo que se refiere a parlamentarios autonómicos, no habrá 'fugas', ya que los dos ourensanos, Suárez Canal y Tereixa Paz, son miembros de UPG; también Leopoldo Rodríguez, diputado provincial, está más cerca de esa 'sensibilidad', no así el otro diputado y alcalde de Vilar de Santos, Xan Jardón que, con todo, no ha decidido la salida del BNG, como tampoco lo hizo, de momento, Teresa Barge, regidora de A Bola. Xurxo Rodríguez, alcalde de Castrelo de Miño, vinculará su decisión a la de su grupo municipal y de la asamblea local, no así Rafael Pérez, alcalde de A Mezquita, que precisó ayer que, aún siendo miembro de Máis Galiza, prefiere quedarse en el Bloque. 'Esta sensibilidade foi creada coa intención de cambiar a formación dende dentro, creo que falando aínda nos podemos entender', precisó.
En realidad, la salida del BNG no es tan fácil para los alcaldes y sus concejales porque, recuerdan Carballido o Bouza, pueden no ser todos de la misma corriente, y una marcha del regidor o de algún concejal puede hacer saltar por los aires algún gobierno municipal.
Mientras, a tan sólo un día después de la escisión, Carballido llama hacia el nuevo partido tanto al PNG como a otros cargos -Bouza, Jardón, Xurxo Rodríguez, ...- que ya están dando pasos en esa dirección porque 'hai espazo para unha segunda opción nacionalista'. Y Pérez Bouza, que ya está fuera del Bloque, espera que sea posible articular un nuevo proyecto más allá de que se unan todos los descontentos con el BNG. En mes y medio, augura, 'saberemos se hai unha nova forza solvente' en el ámbito del nacionalismo gallego.
LOS ALCALDES NACIONALISTAS
Francisco García: El de Allariz es el único regidor de la UPG en Ourense, no así todos sus concejales.
Teresa Barge: Independiente, la alcaldesa de A Bola no definió su postura ni se ha postulado.
Xurxo Rodríguez: El regidor de Castrelo de Miño vincula su decisión a la de su grupo municipal.
Rafael Pérez: El alcalde de A Mezquita es de Máis Galiza, pero se quedará en el Bloque.
Xan Jardón: El alcalde de Vilar de Santos mantiene la incógnita sobre su futuro en el BNG.
Isabel Pérez: La teniente alcalde de Ourense, militante de la UPG, seguirá en el Bloque.
Xabier Oviedo: El alcalde de Maceda fue el primero en salir del BNG con todo su grupo municipal.
David Rodríguez: El alcalde de Manzaneda también se dio de baja en el Bloque, con sus ediles.
