El alcalde de Ourense, Gonzalo Pérez Jácome, informó ayer a los grupos de la oposición en junta de área de que los proyectos para instalar elementos mecánicos para salvar desniveles en distintos puntos de la ciudad no van con la premura que él había anunciado. Según trasladó el regidor, los técnicos municipales han informado desfavorablemente a los proyectos encargados por la Alcaldía a distintas empresas, por lo que se ha tenido que solicitar a los redactores de los mismos que realicen modificaciones.
No fue el único asunto tratado en materia de infraestructuras, poniéndose también sobre la mesa que el proyecto de reforma del Xardín do Posío se entregará el próximo 6 de julio. No hay nada en firme, por su parte, para remodelar el camping de Untes, dado que la obra de saneamiento necesaria para que la instalación vuelva a funcionar no se ha planificado por parte del gobierno local. Tampoco ha habido contactos con la Confederación Hidrográfica Miño-Sil para ver la posibilidad de solucionar el problema de las fosas sépticas.
Con este organismo sigue pendiente la firma de los convenios para el saneamiento de Velle y la prolongación de la senda de Outariz, pendientes del informe favorable de Intervención Municipal.
En lo que respecta a la acera vallada del Puente Romano, tras preguntas de BNG y PSOE, se pusieron de manifiesto las diferencias entre Xunta y Concello para afrontar la necesaria reparación de una zona que lleva dos años en esta situación. Ambas formaciones también se interesaron por el acuerdo con Adif para mejorar la permeabilidad en Ramón Puga y Tarascón, recibiendo por contestación por parte del gobierno local que todavía no hay una partida consignada en el presupuesto para el convenio.
