José Manuel Álvarez Losada es violinista y docente
El músico José Manuel Álvarez interpretará, mañana a las 21,00 horas en el Teatro Principal, una selección de composiciones de los más destacados violinistas clásicos: desde el Barroco hasta el siglo XX. En esta velada, acompañará a Álvarez la pianista menorquina Isabel Fèlix.
¿Cuál es el hilo conector de las melodías de esta noche?
La característica principal es la interpretación de obras de violinistas que comenzaron siendo famosos como intérpretes y que pasaron a la posteridad como compositores: Tartini, Paganini, Wieniawski, Manén, Quiroga y Sarasate. No es un concierto al uso, porque se suelen interpretar obras de diferentes géneros.
¿Usted también compone?
Hoy en día la interpretación y la composición son ocupaciones más separadas, sobre todo desde que existen las discográficas. Por supuesto, existen músicos que muestran esta doble faceta, pero lo más común es que los intérpretes acaben por especializarse, como es mi caso.
¿Son partituras para un solo instrumento?
Las composiciones son todas para violín y piano. Me acompañará la pianista Isabel Fèlix, con la que colaboro desde hace años. Ella, además, es mi compañera en el Conservatorio de Mallorca, donde somos maestros. Sin embargo, en este concierto, como escogimos obras firmadas por violinistas, al final es mi instrumento el que tiene mayor protagonismo. En este caso, el rol del piano es establecer un diálogo con el violín.
¿Le resultó difícil aprender a tocarlas?
Todo el repertorio es un reto; se trata de composiciones de los mejores violinistas de sus respectivas épocas y son muy complejas. Creativamente son partituras muy ricas, y exigen superar las dificultades que presentan para poder dominarlas e interpretarlas con soltura y así no perder la riqueza de la pieza.
¿Tiene algún favorito entre los artistas que interpretará?
La verdad es que disfruto con todos. Cuando elaboré el programa incluí obras de mi interés o con las que tengo mucha afinidad. Eso sí, me gustaría destacar especialmente la figura de Manuel Quiroga, un violinista gallego cuya vida artística despuntó en el primer tercio del siglo XX. Fue un músico excepcional, pero hoy sus obras se interpretan en pocas ocasiones, así que casi se le ha relegado al olvido.
¿Qué emociones quieren despertar en el respetable?
Podrán escuchar composiciones muy expresivas y brillantes. Destacan tanto en la parte melódica como en la emotiva. Cada una de ellas presenta contrastes, ya que estos autores jugaban mucho con la intensidad de las diferentes emociones de un momento a otro.
