Repunta la morosidad del Concello: 83 días para pagar a los proveedores

El gobierno local continúa incumpliendo los plazos de pago de facturas

El Concello de Ourense continúa incumpliendo los plazos en los pagos a sus proveedores y casi triplican el máximo permitido por ley, con casi tres meses de retraso a la hora de abonar las facturas pendientes. 

Según el informe de tesorería relativo al mes de noviembre y que se llevará al próximo pleno municipal, que se celebrará el viernes de esta semana, la morosidad del Concello se enquista y, aunque ha ido mejorando ligeramente desde alcanzar un tope de 125 días el pasado mes de septiembre,  vuelve a repuntar y continúa en cifras inasumibles.

Actualmente, el periodo medio de pago en el Concello asciende a 83,87 días, mientras que en el Consello Municipal de Deportes la cifra es bastante menor, de 22,49 días. En general, toda la administración local tarda 82,87 días en abonar las facturas pendientes. Esta cifra contrasta con lo que establece la Ley 15/2010 de medidas contra la morosidad y supera a los 73 días de retraso en los pagos registrados el pasado mes de octubre. La tesorera del Concello advierte en su informe de que se sigue "a incumprir" el plazo y envió un requerimiento  a los servicios municipales con facturas por tramitar en el registro de facturas.

En total, el Concello acumula 3,25 millones de euros pendientes de pago, a los que hay que sumar los 93.761 euros que adeuda el Consello Municipal de Deportes. El periodo de pago se ha ido reduciendo en los últimos meses después de desbloquear pagos como el de las facturas a los libreros, entre otras. 

En el pleno del próximo día 8 se aprobará de forma definitiva el Reglamento del servicio público del autobús urbano, que había redactado Miguel Caride cuando estaba en el gobierno local. Asimismo, entre las mociones que se presentarán destacan la moción que presentará Democracia Ourensana, un grupo dividido, y que pide la adhesión del Concello al Pacto Antitransfugismo y el Pacto por la estabilidad institucional, dentro del tira y afloja entre Gonzalo Pérez Jácome y los críticos. 

Te puede interesar