Tanto José Garrido como su hijo se pusieron en contacto durante una semana con la Guardia Civil y el 112 sin éxito. Ante tal situación, hablaron con el Concello de Taboadela que parece que ha escuchado su petición
El pasado viernes, Jorge Garrido, un vecino de Mesón de Calvos (Taboadela), manifestaba su malestar ante las instituciones por la falta de respuesta a su solicitud de que retirasen el cuerpo de una mula en las inmediaciones de su casa. Finalmente, su protesta ha dado resultado y el domingo por la mañana, destacó Alberto Garrido, el hijo de Jorge Garrido, la acémila ya no estaba.
Tanto Garrido como su hijo aseguraron no saber quién o qué organismo recogió el cuerpo sin vida del animal: "Cuando mi padre llegó a casa el sábado a las seis de la tarde todavía estaba, pero el domingo el camino estaba vacío y no había rastro de la mula", dijo Alberto Garrido.
Satisfacción
Ante la sorpresa de ver desaparecido el cadáver de un día para otro, padre e hijo preguntaron a algunos vecinos quién había sido el encargado de la extracción. Uno de ellos, dice Alberto Garrido, dijo que el domingo por la mañana "había un camión del Concello y varios operarios desbrozando la hierba de la zona y que, tras los trabajos, el animal ya no estaba".
Hay que recordar que tanto José Garrido como su hijo se pusieron en contacto durante una semana con la Guardia Civil y el 112 sin éxito. Ante tal situación, hablaron con el Concello de Taboadela que parece que ha escuchado su petición y ha retirado la mula del camino.
