Son los más afectados por los nuevos gravámenes, que ya se aplican en las gasolineras ourensanas

Los taxistas y pequeños transportistas piden exenciones frente a los impuestos del gasóleo

Cartel de precios que exhibía ayer la gasolinera del Polígono de San Cibrao. (Foto: Miguel Ángel)
Los taxistas y transportistas de furgonetas o pequeños camiones son los colectivos más afectados por la subida de impuestos que ya se aplica en las gasolineras ourensanas. La medida impositiva afecta también al tabaco, aunque todavía no se ha repercutido en los precios de los estancos.
Transporte ligero y taxistas son los colectivos profesionales que más acusan ya la subida de impuestos anunciada por el Gobierno el pasado viernes. En las gasolineras se aplica ya el nuevo gravamen, lo que, unido al encarecimiento que está experimentando el combustible con la llegada del verano, provoca una acusada subida en lo que va de mes: entre siete y ocho céntimos por litro.

Así, los taxistas explican que, con la subida de precios, la ganancia de uno de cada cuatro días se la lleva el combustible. ‘Nesta época ven mal, porque o traballo caeu bastante coa crise’, explica Francisco Álvarez, presidente de la Asociación Provincial de Taxis. De hecho, cifran el descenso de actividad durante el primer semestre del año entre un 15 y 20% con respecto al mismo periodo de 2008. Por ello, reclaman al Gobierno medidas de descuento del precio para los profesionales.

Mientras, el transporte de mercancías en furgonetas y camiones pequeños (que no alcancen las 7,5 toneladas) es el más afectado, mientras los autobuses y camiones que superen ese peso están exentos a través del gasóleo profesional (la Agencia Tributaria les devuelve trimestralmente el importe gastado). Desde la Asociación de Transportistas Apetamcor coinciden en reclamar que estos profesionales puedan beneficiarse del gasóleo profesional.

En el caso del tabaco, la subida aún no repercutió en el precio de venta al público en los estancos, pues son las marcas las que están asumiendo el incremento. De hecho, las empresas aún tienen que remitir los nuevos precios al Comisionado de Tabacos para que éste los apruebe y luego los publique en el BOE. No obstante, los clientes ya preguntan si ha subido, aunque sólo una minoría están comprando más para tener reservas, según Merche Alonso, de la Asociación de Estancos de Ourense.

El carburante rompe su estabilidad

Después de haber alcanzado máximos históricos durante el verano pasado -cuando la gasolina 95 llegó a 1,28 euros por litro y el gasóleo a 1,32- los carburantes moderaron su precio entre finales del año pasado y principios de éste. Así, la gasolina estaba en abril en 0,96 euros, pero en mayo subió hasta 1,02 a final de mes. Sin embargo, en lo que va de junio ha llegado ya a 1,10 euros por litro. Mientras, el gasóleo permaneció estable en torno a los 0,88 euros, pero ayer ya costaba 0,96. Los transportistas profesionales sostienen que en los últimos meses los precios evolucionaban de forma ‘razonable’, pero temen por el impacto en los no incluidos en el gasóleo profesional y que en verano haya más subidas.

Además, este colectivo es de los más afectados por la crisis, con una caída del 40% en la actividad del primer trimestre del año, aunque en el segundo están recuperándola, ‘pero non chega ó volume de traballo de anos anteriores’, señala Alberto Vila, de Apetamcor. Además, los profesionales se están viendo muy perjudicados por los impagos.

Cinco millones al mes en tabaco

En lo que se refiere al consumo de tabaco por parte de los ourensanos, el gasto medio mensual en la provincia supera los cinco millones de euros, según los datos del Ministerio de Economía. En concreto, entre enero y abril de 2009 se gastaron en Ourense 22.268.041 euros en estos productos, un 2,8% más que en el mismo periodo de 2008. Los datos de consumo en Ourense muestran que, en el primer cuatrimestre del 2009, bajó la venta de cajetillas, pero creció la de puros, tabaco de pipa y, sobre todo, la de picadura para liar (que se duplicó con respecto al año pasado).



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