El telepeaje lleva el caos a las autovías lusas

Una señal avisa del telepeaje en la A-24 en la Verín-Chaves-Viseu (Foto: Miguel Ángel)
La ampliación del telepeaje en las autovías portuguesas que hasta el momento eran gratuitas, entre ellas la A-24 que enlaza con la ourensana A-75 en Verín, está generando una agria polémica, tanto en el país vecino como entre los conductores extranjeros.
La situación es tal que la Guardia Nacional Republicana, equivalente en España a la Guardia Civil, se vio obligada a establecer vigilancia en torno a los pórticos instalados en las vías de alta capacidad para cobrar a los conductores. Los agentes no los pierden de vista después de que fueran incendiadas y tiroteadas las cámaras de uno de estos pórticos en la autovía A-22 (Algarve-Huelva), con el resultado de una persona herida grave.

La polémica viene suscitada por las elevadas tarifas y la falta de información sobre la adquisición de los aparatos para efectuar el pago. Porque el funcionamiento es, cuando menos, complejo y, sobre todo, caro. En la vía de alta capacidad que comunica Chaves con Viseu y enlaza con Verín, los primeros ocho kilómetros, entre Feces de Abaixo (Verín) y Outeiro Seco están libres de peaje y los conductores disponen de dos enlaces gratuitos para acceder al casco urbano de Chaves. Pero el coste final de otodo el trayecto, de 160 kilómetros, puede ser de hasta 16 euros.

También se incrementa notablemente el acceso, por Tui, al aeropuerto de Oporto, muy utilizado por ourensanos y gallegos. La A-28 es gratuita de Valença a Viana do Castelo pero llegar a ese aeropuerto supera los seis euros (sólo en viaje de ida) si el conductor circula por la A-28 y más de nueve si lo hace por la veterana autopista; ocurre que a las dos vías de alta capacidad hay que unirle el acceso del aeropuerto, unos pocos kilómetros de autovía donde también se instaló este mes el telepeaje.

Las tarifas provocaron que un total de 336.400 conductores lusos se acogieran, tal y como dio a conocer esta semana la empresa Brisa, que gestiona la autopista A-3 (Valença-Oporto), a las descuentos que ofrece el Gobierno. Pero los conductores de coches con matricula extranjera no pueden hacerlo, algo que el gerente de la asociación ourensana de transportistas de mercancías por carretera (Apetamcor), Alberto Vila, considera 'una discriminación' y una vulneración de la normativa europera sobre el transporte.

Las oficinas de Correos del país vecino vendieron sólo entre el pasado 29 de noviembre y el 14 de diciembre 25.700 aparatos para pagar el peaje. Lo hicieron después de que, en el caso de la A-24, el tráfico rodado cayera un 70% según los datos que maneja la Guardia Nacional Republicana.

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