"Ourense es una buena opción para organizar congresos gracias a que contamos con un campus muy céntrico que permite a los ponentes conocer la ciudad". asegura el vicepresidente de la Comisión Internacional del Óptica (ICO), Humberto Michinel
El Congreso Nacional del Color, organizado por la Sociedad Española de Óptica, hace parada en Ourense en su undécima edición. El edificio Politécnico acogerá desde hoy y hasta el jueves a los 66 ponentes participantes, que abordarán las aplicaciones de la luz relacionadas con el color.
Todo ello gracias al trabajo del profesor Humberto Michinel, que ya en el 2009 convirtió a la ciudad en la sede del Congreso de Óptica. Entre los relatores, destacan Sophie Wuerger, de la Universidad de Liverpool; Stephen Westland, de la de Lees o el mexicano Iván Moreno, experto en tecnología LED.
¿Por qué se eligió Ourense para la celebración del encuentro?
Ourense es una buena opción para organizar congresos gracias a que contamos con un campus muy céntrico que permite a los ponentes conocer la ciudad. Además, cuando tengamos la conexión con el AVE será todavía mucho mejor porque la gente llegará a Madrid , cogerá el tren y en dos horas estará aquí. Esto hace que nos posicionemos bien en el mundo del Turismo de Congresos. También hemos organizado con la Facultad de Turismo una excursión al monasterio de Oseira y un tour guiado por la ciudad.
¿Qué aspectos relacionados con el color se abordarán en el foro?
Uno de ellos está vinculado con el arte y la arquitectura; es decir, cómo influye el color de los edificios en la estética de las ciudades. En el Museo del Prado, por ejemplo, cambiaron hace un año la iluminación a LED, que es más similar a la solar, con la que pintaron los artistas, por lo que el visitante se pondrá más en el punto de vista original de los artistas. También habrá una sesión plenaria relacionada con la percepción del color, que es una invención del cerebro.
¿Cuál es la aportación del laboratorio de Óptica que dirige en el campo del color?
Presentamos una ponencia sobre detectores de color con fluorescencia; es decir, cuando se ilumina un contaminante con un láser, la mancha de ese vertido te devuelve cierto tipo de luz. Examinando el color de ésta se puede deducir qué tipo de contaminante hay ahí. Esto se enlaza con tecnologías como la de los drones. Ahora con Enxeñaría Aeroespacial hay mucho futuro en lo que es la conexión entre las tecnologías fotónicas y la drónica. Por ejemplo, equipando un dron con sistemas de detención como las cámaras hiperespectrales, se pueden obtener datos muy útiles para saber si en una plantación de vid el riego es más necesario en una zona u otra. También se pueden obtener una imagen térmica de un edifico para saber si hay fugas de calor.
¿En qué otras líneas de investigación trabajan?
Las dos últimas que hemos abierto están relacionadas con la eficiencia energética y con la materia oscura. En cuanto a la primera, usamos modelos matemáticos para predecir los consumos energéticos en edificios, una cuestión muy de moda. Por otro lado, publicamos en junio un artículo en la prestigiosa revista "Physics of the Dark Universe" en el que damos una explicación sobre qué puede ser la materia oscura.
Ocupa el cargo de vicepresidencia de la Comisión Internacional del Óptica (ICO), ¿Cuál es su papel en el organismo?
Expandir la disciplina a nivel mundial y decidir, por ejemplo,que el Año Internacional de la Luz, en 2015, se celebrase en Ourense. También promover la educación científica en África. De hecho, en octubre viajaré a Mali y Guinea Ecuatorial para estudiar su posible incorporación a ICO.
