Las mínimas, que la noche del martes dejaron una cifra récord por lo elevadas que fueron, también descenderán 11 grados
Tras cuatro días de asfixiante calor en la provincia, con valores que superaron los 41 grados el martes y el miércoles, las altas temperaturas remitieron y continuarán haciéndolo de forma progresiva. En cuestión de tres días, el termómetro de la ciudad se desplomará 16 grados. Mientras que la máxima del miércoles fue de 42 grados, la predicción marca 26 para el sábado. La ola de calor, por tanto, se da por superada.
Las mínimas, que la noche del martes dejaron una cifra récord por lo elevadas que fueron, también descenderán 11 grados. Los ourensanos pasaron la noche más tórrida del siglo en la ciudad, a 22 grados de temperatura. No se registraba una mínima tan elevada desde 1985.
Para los próximos días, el efecto del anticiclón, que se situará próximo a las Azores, dejará cielos con nubes y claros durante todo el fin de semana. Sin embargo, tanto Ourense como Pontevedra, se librarán de la lluvia.
Por otra parte, en Valdeorras, donde sufrieron las consecuencias de una ola más prolongada, de cinco días, el calor también amainó. En tres días, de 41,9 grados bajarán hasta los 25. Durante este episodio, se estableció una alerta roja por peligro para salud.