ESTADO DE ALARMA

Treinta chivatazos cada día a las fuerzas de seguridad en Ourense

Los agentes recibieron avisos por viajes innecesarios, bares que estaban abiertos y reuniones en bajos y domicilios

Los balcones y ventanas de las viviendas se convirtieron en una especie de "torres de vigilancia" para delatar a personas sospechosas de  burlar la actual situación de alarma y que salen a la calle sin causa justificada. Las fuerzas de seguridad registran a diario una media de 30 alertas de ciudadanos, que en su mayoría prefieren quedar en el anonimato, sobre personas que  pasean por delante de sus casas, jóvenes que se divierten con sus bicicletas o juega en un parque y viandantes que están haciendo deporte.

Los agentes no contabilizan las llamadas referidas a los chivatazos por incumplir la obligatoriedad de permanecer en la vivienda, pero las agradecen al considerar que son una prueba de que buena parte de la sociedad "está implicada y colabora para respetar la actual situación de emergencia", cuyo objetivo es frenar la propagación del patógeno.

Tanto la Guardia Civil, como la Policía Nacional y las distintas policías locales acuden al lugar para comprobar la veracidad de  cada uno de los chivatazos con el objetivo de sancionar a los infractores. "Hay veces en que las personas ya se marcharon o se ocultan ante la presencia policial. En otras, el desplazamiento está justificado", aseguraron fuentes del Instituto Armado.

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Este cuerpo de seguridad recibe llamadas desde todos los rincones de la provincia. Desde que entró en vigor el estado de emergencia, fueron alertados de bares que atendía clientes a puerta cerrada, de la presencia de varios personas que aprovechaban un bajo  o una vivienda para consumir alcohol y divertirse, además de agricultores que se desplazaban en tractor sin causa justificada por los diferentes pueblos.

Los cuerpos de seguridad tienen desplegados en al calle la mayor parte de sus efectivos. El Ministerio del Interior suspendió a los agentes a causa del decreto de emergencia la petición de días libres y periodos vacacionales. 

Policías y guardias civiles sobrepasan ya el millar de denuncias por no respetar la obligación de permanecer en las viviendas, según datos del Ministerio del Interior.  Parte de las sanciones fueron impuestas al sorprender a los infractores tras el chivatazo de un vecino. 

Alcohol y ruidos

Los agentes también detectaron un incremento de llamadas por ruidos, sobre todo durante la noche, en el interior de viviendas y de personas que caminan en estado ebrio por la vía pública.

En este caso, los agentes también comprueban cada una de las alertas, que en su mayoría suelen dar resultado positivo, sorprendiendo a los infractores. "La mayor parte de la ciudadanía es consciente de la gravedad de la situación que estamos atravesando  y colabora", aseguraron fuentes del Instituto Armado. 

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