El Tribunal Superior de Xustiza de Galicia estima el recurso de la Junta de Compensación del polígono de As Lagoas -el conocido como solar de la Asunción, en el entorno de la residencia universitaria- y obligará a la Universidad de Vigo a pagar casi un 20% de los costes de urbanización de toda la parcela, lo que podría rondar los 750.000 euros. La sentencia estima el recurso de los propietarios de los terrenos cedidos en su día para hacer la residencia y revoca la sentencia dictada por el Juzgado Contencioso Administrativo número 1 este mismo año, que daba la razón al Concello y no consideraba a la Universidad obligada a financiar los trabajos de urbanización que se están llevando a cabo en esta parcela de 26.000 metros cuadrados. Este solar, ubicado entre la avenida Otero Pedrayo y la iglesia de la Asunción, sigue inutilizado, ya que solo se ha urbanizado la zona inmediatamente contigua a la residencia. Sin embargo, ahora están en marcha más trabajos para crear edificios, un gran parquin público y zonas verdes. Tras esta sentencia, deberá pagar la Universidad una parte.
El origen
En su día, el Concello había denegado exigir a la Universidad el cumplimiento del convenio de 1998 entre ambas instituciones, que incluía en su cláusula cuarta la obligación del organismo educativo de pagar su parte proporcional (19,42%) de la urbanización del 100% de los terrenos. En ese convenio, el Concello le había entregado una parcela de 5.232 m2 dentro de un polígono que consta de 26.945 m2 para hacer la residencia, pero con esa condición. El terreno cedido por el Concello había sido obtenido cinco años antes de manos de Casas Orense (empresa que lidera la junta de compensación).
La Universidad adjudicó a Siresa la construcción y explotación de la residencia, que se terminó en 2001, pero la concesionaria no realizó obras de urbanización básicas y la junta exigió el cierre por carecer de licencia de ocupación. Cuando la Concejalía de Urbanismo se la otorgó, la junta acudió a la Justicia para pedir la anulación y exigir el cierre, al seguir sin la urbanización elemental. Esto desembocó en la clausura de la residencia en agosto de 2014, por orden judicial, cuando contaba con 180 hospedados. El complejo se reabrió en enero de 2017, tras realizar la junta la urbanización básica, con un gasto de 775.000 euros, de los cuales la concesionaria abonaba 295.000 euros, para así agilizar la reapertura.
La sentencia tumba la tesis defendida por el Concello
En 2015, la junta de compensación solicitó al Concello que exigiese a la UVigo cumplir el convenio de 1998 y pagar la parte proporcional de la urbanización, algo a lo que el Concello se negó, al entender que el convenio ya no era eficaz, al haber pagado la concesionaria una parte. En primera instancia, la Justicia avaló la versión del Concello, pero ahora el TSXG declara la validez del convenio y obliga a la UVigo a pagar el 19,4% que, según el letrado de la junta, Antonio Feijóo Miranda, rondaría los 750.000 euros, ya que el gasto total de la urbanización ascenderá a 3,81 millones. “Se trata de un caso extremadamente complejo por la defectuosa redacción del convenio y las variaciones de la legislación urbanística, pero ha triunfado nuestra tesis. Es de justicia, porque la Universidad recibió gratuitamente una parcela de suelo público sin aportar absolutamente nada a la urbanización de este polígono”, señala el abogado.
