Nervios, repasos de última hora y charlas con los compañeros para ver cómo contestaron ellos esa pregunta que les pareció más complicada. Los pasillos de las facultades de Derecho, Empresariales e Historia revivieron ayer, un año más -el penúltimo antes del cambio de la ley Wert-, las sensaciones que inevitablemente se experimentan el primer día de la selectividad. Un 'trance' por el que ayer pasaron 1.165 alumnos ourensanos, de los que 128 se examinaron en el instituto Cosme López de A Rúa.
En el primer descanso de la mañana, con el primer examen ya pasado, la cosa no pintaba mal para algunos. 'Es más duro estudiar que lo que es después el examen, al menos en lo que vi en éste', comentaba una alumna, aunque un compañero calificaba esa misma prueba de 'complicada'.
Lengua castellana y literatura fueron las encargadas de romper el hielo de tres días de exámenes. Los alumnos tuvieron que escoger entre el análisis de un texto de Rosa Montero sobre la dejadez de responsabilidades de la sociedad respecto a las miserias del mundo con la excusa de la crisis económica u otro de Manuel de Castro, en el que razona sobre la importancia de dar la cara ante la corrupción, poniendo como ejemplo la entrevista a Lance Armstrong sobre su dopaje y comparándolo con el caso español, en el que arremete contra los que no reconocen sus trampas ni en el deporte ni en la política. La narrativa hispanoamericana de la segunda mitad del siglo XX, con García Márquez o Vargas Llosa, se enfrentaba en el apartado literario a la Generación del 27 a través de Salinas, Lorca, Alberti y Cernuda.
La mañana siguió con el examen de Historia de España e Historia de la Filosofía, mientras que por la tarde le tocó el turno a la Lengua Gallega y Literatura y al idioma extranjero. La sesión de hoy será la más intensa, mientras que mañana los exámenes quedarán finalizados a primera hora de la tarde.
Después, los alumnos permanecerán a la espera de si los resultados les permitirán acceder a la carrera universitaria que desean. Algunos no tienen claro cuál será pero otros apuestan por Veterinaria, Económicas o Psicología. Todos ellos forman parte de una generación que participa en lo que parece ser el fin de una era: la de la selectividad, que parece tener los días contados con la ley Wert (que entraría en vigor en el curso 2014-2015).
Lengua castellana y literatura fueron las encargadas de romper el hielo de tres días de exámenes. Los alumnos tuvieron que escoger entre el análisis de un texto de Rosa Montero sobre la dejadez de responsabilidades de la sociedad respecto a las miserias del mundo con la excusa de la crisis económica u otro de Manuel de Castro, en el que razona sobre la importancia de dar la cara ante la corrupción, poniendo como ejemplo la entrevista a Lance Armstrong sobre su dopaje y comparándolo con el caso español, en el que arremete contra los que no reconocen sus trampas ni en el deporte ni en la política. La narrativa hispanoamericana de la segunda mitad del siglo XX, con García Márquez o Vargas Llosa, se enfrentaba en el apartado literario a la Generación del 27 a través de Salinas, Lorca, Alberti y Cernuda.
La mañana siguió con el examen de Historia de España e Historia de la Filosofía, mientras que por la tarde le tocó el turno a la Lengua Gallega y Literatura y al idioma extranjero. La sesión de hoy será la más intensa, mientras que mañana los exámenes quedarán finalizados a primera hora de la tarde.
Después, los alumnos permanecerán a la espera de si los resultados les permitirán acceder a la carrera universitaria que desean. Algunos no tienen claro cuál será pero otros apuestan por Veterinaria, Económicas o Psicología. Todos ellos forman parte de una generación que participa en lo que parece ser el fin de una era: la de la selectividad, que parece tener los días contados con la ley Wert (que entraría en vigor en el curso 2014-2015).
