Continuas demoras de tramitación mantienen a la circunvalación norte de la ciudad inmersa en estudios que no llegan a concretarse en obras. Así van ya 18 años y la infraestructura continúa sin tener fecha de inicio de obra. De hecho, Fomento elude dar plazos en respuesta a una pregunta parlamentaria del BNG, en la que, además, reconoce que en 2011 no se ejecutó inversión alguna en este proyecto (los presupuestos de ese año contemplaban 134.000 euros de inversión).
La variante norte tiene como objetivo enlazar la carretera N-525 (a la altura del enlace de Velle y futura conexión con la autovía de Lugo) con la N-120 en Eirasvedras (en el acceso de la autovía A-52), con el fin de desviar el tráfico del centro urbano.
La tramitación de esta obra se remonta a 1994, cuando se presentó el primer estudio informativo. No obstante, las propuestas presentadas entonces fueron descartadas por el Concello ourensano por su fuerte impacto en la zona afectada, y se procedió a elaborar otro informe que no concluyó hasta 2001. Este estudio proponía otras tres alternativas, pero el Concello ourensano propuso una cuarta, que fue la que finalmente se aceptó. La declaración de impacto ambiental no estuvo concluida hasta mayo de 2006 y la aprobación definitiva del trazado tardó 11 meses más, hasta abril de 2007. Ese año, en noviembre, Fomento licita el contrato de asistencia técnica al proyecto de obra, que en abril de 2008 adjudicó a la consultora Inocsa, con el encargo de que esté concluido en siete meses, es decir, en enero 2009. Sin embargo, el estudio no salió a información pública hasta prácticamente dos años más tarde, en diciembre de 2010, cuando se expuso al público en la sede de la Demarcación de Carreteras.
SIN AVANCES
Desde este último trámite ha transcurrido ya más de año y medio, y Fomento sigue sin avanzar en esta infraestructura. En la respuesta ofrecida al BNG, el ministerio sostiene que aún debe de realizarse la aprobación definitiva del estudio de trazado y que 'durante 2012 se procederá a la redacción del proyecto constructivo', sin concretar ni siquiera el plazo que llevará la elaboración del citado trabajo.
La parlamentaria del BNG Olaia Fernández Dávila, que planteó la pregunta al Gobierno, considera que, a pesar de tratarse de una infraestructura necesaria para Ourense, 'atópase en situación de parálise'. La parlamentaria cuestiona que el ministerio reconozca que en 2011 'no se han reconocido obligaciones con cargo a los presupuestos', cuando estaba presupuestada una inversión de 134.000 euros en los proyectos. En 2012, estaba prevista otra inversión de 160.000 euros.
La tramitación de esta obra se remonta a 1994, cuando se presentó el primer estudio informativo. No obstante, las propuestas presentadas entonces fueron descartadas por el Concello ourensano por su fuerte impacto en la zona afectada, y se procedió a elaborar otro informe que no concluyó hasta 2001. Este estudio proponía otras tres alternativas, pero el Concello ourensano propuso una cuarta, que fue la que finalmente se aceptó. La declaración de impacto ambiental no estuvo concluida hasta mayo de 2006 y la aprobación definitiva del trazado tardó 11 meses más, hasta abril de 2007. Ese año, en noviembre, Fomento licita el contrato de asistencia técnica al proyecto de obra, que en abril de 2008 adjudicó a la consultora Inocsa, con el encargo de que esté concluido en siete meses, es decir, en enero 2009. Sin embargo, el estudio no salió a información pública hasta prácticamente dos años más tarde, en diciembre de 2010, cuando se expuso al público en la sede de la Demarcación de Carreteras.
SIN AVANCES
Desde este último trámite ha transcurrido ya más de año y medio, y Fomento sigue sin avanzar en esta infraestructura. En la respuesta ofrecida al BNG, el ministerio sostiene que aún debe de realizarse la aprobación definitiva del estudio de trazado y que 'durante 2012 se procederá a la redacción del proyecto constructivo', sin concretar ni siquiera el plazo que llevará la elaboración del citado trabajo.
La parlamentaria del BNG Olaia Fernández Dávila, que planteó la pregunta al Gobierno, considera que, a pesar de tratarse de una infraestructura necesaria para Ourense, 'atópase en situación de parálise'. La parlamentaria cuestiona que el ministerio reconozca que en 2011 'no se han reconocido obligaciones con cargo a los presupuestos', cuando estaba presupuestada una inversión de 134.000 euros en los proyectos. En 2012, estaba prevista otra inversión de 160.000 euros.
