Decenas de vecinos de los pueblos del entorno del monasterio de Rocas se movilizaron este domingo para defender la mejora de la carretera Esgos-Luintra, obra ejecutada por la Diputación de Ourense que se ha visto paralizada en varias ocasiones por las protestas de la Fundación Moreiras, que dirige Juan Carlos Moreiras, cuya familia tiene una propiedad en esa zona, y por las protestas de grupos ecologistas que se han sumado a esta familia.
"Ampliar a estrada non é un delito", corearon los vecinos frente a la Casa Coutada, propiedad de los Moreiras, familia que intenta paralizar la obra argumentando que esta afecta a árboles centenarios y a parte del monasterio. Al final de la concentración, Moreiras tuvo un enfrentamiento con los vecinos allí congregados. "Os veciños levamos anos reclamando a ampliación desta estrada e ímolo conseguir, porque as obras non afectan ao mosteiro. Rocas está a salvo. Nós buscamos a seguridade vial e por iso a familia Moreiras non nos parará, nin hoxe nin mañá, nunca nos pararán".
Tras escuchar el clamor vecinal y tras ser increpado por los asistentes, Juan Carlos Moreiras reconoció en público que la ampliación de la carretera era necesaria, aunque volvió a insistir en que afectaba a parte del monasterio, un extremo que los vecinos niegan.
Precedentes
Los vecinos de A Cernada, Loña do Monte, Lobaces y Gomariz llevan “máis de vinte anos pelexando por esta obra, que nos fai ben tanto aos de aquí coma a todos os turistas que nos queren visitar”, indican desde la asociación de vecinos de Lobaces. Así, hacen énfasis en que tanto la Fundación Moreiras como los grupos ecologistas que la apoyan tienen “intereses persoais ocultos” en retrasar esa obra lo máximo posible.
