La estación de Ramuíño, en el concello de Arnoia, registró la máxima de toda Galicia
La provincia de Ourense vivió ayer un anticipo del verano con temperaturas que llegaron hastra los 30 grados en la estación de Remuíño (Arnoia) o los 28,4 de la ciudad debido a la influencia del anticiclón, con vientos del sur que envían aire cálido.
Las temperaturas cálidas de esta semana, que han alcanzado valores 11 grados superiores a lo normal, comenzarán a descender el fin de semana, cuando volverán las precipitaciones, incluso en forma de nieve, según la Agencia Estatal de Meteorología. La portavoz de la AEMET, Ana Casals, explicó que este episodio de altas temperaturas "entra dentro de lo normal" pues se deben a la variabilidad climática motivada por una dorsal anticiclónica que no deja pasar las borrascas atlánticas. "Son muy altas para esta época del año. Ayer las máximas estuvieron entre 7 y 11 grados centígrados por encima de lo normal en buena parte del país si se tiene en cuenta todos los 8 de marzo entre 1981 y 2010", explicó.
No obstante, la máxima para el mes de marzo en la ciudad, según Meteogalicia, está en los 30,6 que se alcanzaron el día 23 del año 2002.
En cuanto a las mínimas, en la ciudad los termómetros bajaron hasta los cinco grados.
