La familia durmió los dos días en un coche estacionado en una gasolinera
El matrimonio natural de Rumanía que se llevó a hija de siete meses del CHUO sin recibir previamente el alta médica podría perder temporalmente la custodia tanto de la niña, como de otros dos menores (uno de ellos es una niña de seis años ingresada en el centro sanitario) hasta que no encuentren un trabajo y un domicilio estables.
El Servicio de Menores de la Xunta abrió un expediente de protección con el objetivo de revisar la custodia, dando traslado de la iniciativa a la Fiscalía de Menores para que emita el correspondiente informe. La Administración autonómica puso en marcha el expediente después de que agentes del Unidad de Prevención y Respuesta de la Comisaría ourensana localizaran, a las 13,45 horas del pasado viernes, a la pareja con sus cinco hijos (dos son mayores de edad) dentro de un coche matricula francesa en una gasolinera de O Piñeiral (San Cibrao). El vehículo estaba estacionado y, según fuentes policiales, la familia lo utilizaba para pasar la noche desde que llegaron de Alemania, el pasado fin de semana.
Los agentes trasladaron de nuevo a la bebé al CHUO y a una hermana suya al encontrarse enfermas, permaneciendo ayer ingresadas. Mientras, la Comisaría ofreció al resto de la familia pernoctar en un albergue, pero, según fuentes policiales, declinaron la oferta asegurando que prefería quedarse en el CHUO para estar más cerca de las dos menores ingresadas. El cabeza de familia confesó a los agentes que se había llevado a su hija de la planta de Pediatría al entender que ya se encontraba bien.
La familia llegó a Ourense el pasado fin de semana procedente de Alemania al prometerle un amigo suyo trabajo (el hombre se dedica a la construcción) en la provincia. Se desplazaron con la promesa de pernoctar en su domicilio, pero al llegar no lo encontraron, dado que ha cambiado de domicilio. Aseguran no saber dónde se encuentra.
Así, la intención de la familia era regresar de nuevo a Alemania, pero según explicó a los policías, se le averió el automóvil. Durante su estancia en la ciudad, solicitó la colaboración de un conocido que encontró en O Couto, para llevar a su hija a un hospital, dado que no paraba de llorar y veía que se encontraba mal de salud.
El matrimonio se mostró dispuesto a colaborar en todo lo necesario con la Policía Nacional y autoridades sanitarias.
