Pone en marcha la tercera fase, entre Rairo y Benposta, pero no ofrece plazos para la ejecución del cuarto tramo ni para construir el acceso al Polígono Industrial de San Cibrao desde la autovía

La Xunta demora el enlace de la variante Este y la A-52

Rogelio Martíenz, Rosendo Fernández, Agustín Hernández y Francisco Rodriguez recorren la tercera fase de la variante Este. (Foto: JOSÉ PAZ)
El tercer tramo de la circunvalación Este de Ourense está ya en servicio desde ayer, después de un acto de puesta en servicio desarrollado en Benposta, al que acudieron el conselleiro de Medio Ambiente, Territorio e Infraestructuras, Agustín Hernández, y el alcalde de la ciudad, Francisco Rodríguez.
El tramo recién abierto tiene 1.650 metros de longitud, entre Rairo y Benposta. Da continuidad a los dos ya existentes, Os Viros-A Granxa y A Granxa-Rairo, que están operativos desde 2003 y 2006, respectivamente. No obstante, las obras de la tercera fase no comenzaron hasta 2010, pues el estudio de trazado se demoró mientras no se diseñó el acceso del AVE a Ourense (que transcurre por la misma zona), para evitar interferencias entre ambos proyectos.

'É importante para a cidade de Ourense, que supuxo un investimento de tres millóns de euros', señaló el conselleiro, que considera que esta obra es una muestra de la sensibilidad de la Xunta hacia 'os investimentos en Ourense'.

No obstante, la variante Este tiene todavía pendiente de ejecución su última fase, la cuarta, entre Benposta y la N-525 (a la altura del acceso sur a la A-52), que permitirá mejorar su funcionalidad al conectar directamente con ambas carreteras. No obstante, la construcción de este nuevo trazado, de 1,5 kilómetros de longitud, carece todavía de plazos. Hernández indicó que este tramo, al igual que la conexión entre el Polígono de San Cibrao das Viñas y la A-52, está incluido en el Plan Sectorial da Rede Viaria de Ourense, que actualmente se encuentra en fase de exposición pública y análisis de alegaciones. Una vez se apruebe el citado documento, se procederá a la redacción de los proyectos constructivos y, posteriormente, expropiaciones y ejecución de las obras, pero el conselleiro no concretó plazos para estas actuaciones.

En todo caso, el citado documento contempla no sólo la ejecución de la cuarta fase, sino también otro tramo no previsto hasta ahora: la conexión desde su inicio -en la OU-536, a la altura de Os Viros- con la carretera N-120 (en la zona de Velle), para en un futuro enlazar con la autovía de Lugo.

Vecinos de la zona afectada por las obras también acudieron al acto de inauguración para reclamar pasos más seguros por la zona.


AUTOVÍA DE CELANOVA

El conselleiro también se refirió a las obras de la autovía de Celanova, que están 'avanzando a bo ritmo'. En concreto, se está procediendo al asentamiento de la plataforma de cemento, previo al depósito de las capas de aglomerado, y Hernández espera que la vía entre en servicio a final de año. 'Unha autovía que se financia mediante unha peaxe na sombra', posible gracias a la política de 'contención de gasto' de la Xunta', concluyó.

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