INICIATIVA

Parada de Sil enseña a cocinar utilizando la energía solar

photo_camera Un menor intenta manejar uno de los utensilios que aprovechan el sol para cocinar alimentos

El Concello organizó el primer certamen "Ecos da Luz", en el que se llegó incluso a preparar pizzas

El espacio de turismo rural A Fábrica da Luz, en Parada do Sil, acogió ayer el primer certamen "Ecos da Luz", organizada por la empresa que gestiona el monasterio de Santa Cristina en colaboración con el Concello. La iniciativa despertó interés entre los vecinos y visitantes que tuvieron la oportunidad de comprobar cómo funciona un horno aprovechando la energía solar, en el que se llegó incluso a cocinar una pizza.

También hubo explicaciones sobre el funcionamiento de cocinas por acumulación de los rayos solares y incluso explicaciones sobre los beneficios de cocinar con el sol. Eso sí, los tiempos para la preparación de los menús son largos, en el caso de la una carne está entre los 180 y los 300 minutos.

El taller solar lo desarrollaron los miembros de la asociación Picos do Sol, que también instaron a los presentes a construir cajas solares para cocinar alimentos.

Además de la cocina, el colectivo también realizó demostraciones con un pirógrafo solar para trabajar la madera e incluso realizar pinturas.

El evento, que según el alcalde, Francisco Magide, tendrá continuidad en los próximos años, se complementó con una exposición del artistas Xosé Manuel "Moxom", cuya obra -12 piezas de cerámica creativa y cuatro esculturas- se pondrán ver hasta el próximo día 17 de agosto.

El regidor recordó que con la iniciativa pretende crear un espacio para compaginar la tecnología con el arte y la música. Y esta última llegó sobre las ocho de la tarde de la mano del músico ponferradino Alfonso Álvarez, que aprovechó el marco del monasterio de Santa Cristina para presentar su segundo trabajo; "Sin primavera no hay abril".

La jornada finalizó con el espectáculo "Wapapura Solar System" de un grupo granadino, con el que se pretende unir la música y el medio ambiente.

El Concello se vio obligado a abrir el albergue municipal para que pudieran pernoctar durante el fin de semana algunos de los visitantes.

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