El alcalde habla de "enquistamiento" anormal y el PP le reprocha que no resuelva el "atasco"
Han transcurrido cinco meses desde que las autoridades municipales de Ribadavia mantuvieron la última reunión en Patrimonio con el fin de sacar adelante su Plan Xeral de Ordenación Municipal (PXOM), teniendo en cuenta que es el único informe que está pendiente desde que se solicitó junto con otros perceptivos tras la aprobación inicial del plan en el 2008. Sin embargo, Patrimonio todavía no ha dado una respuesta favorable al proyecto, pese a que, según apunta el alcalde de Ribadavia, Marcos Blanco, ya se han hecho las pequeñas modificaciones que los técnicos de Patrimonio habían exigido. "Pensamos que este informe no supondría ningún problema teniendo en cuenta que los cascos históricos de Ribadavia y San Cristovo están ya sujetos a los planes de protección especial para la rehabilitación", señala el regidor, añadiendo que "existe un enquistamiento que no es normal, porque el informe tendría que estar listo por lo menos en 2010".
En ese sentido, afirma Marcos Blanco que este retraso "está paralizando obras interesantes para Ribadavia como es la construcción de un cementerio nuevo porque no tenemos terreno calificado". De hecho, hoy vuelve a pleno una modificación puntual de las normas subsidiarias , que por un error técnico se deberá aprobar por segunda vez, para recalificar el terreno en donde está prevista la construcción de un nuevo centro de salud, comprometido por la Xunta, porque "nos dimos cuenta que será más rápida la modificación puntual que esperar por el PXOM", matiza el alcalde.
Entre tanto, el Concello tampoco ha resuelto las aproximadamente 300 alegaciones particulares, a la espera de recibir el informe de Patrimonio y continuar el proceso cara la aprobación definitiva. El grupo municipal del PP responsabiliza al equipo de gobierno del retraso que "está provocando inseguridad jurídica entre los vecinos que han hecho alegaciones y de parálisis en el Concello, porque tiene el plan atascado", señalaba el portavoz, César Fernández. Afirma que el proceso se inició hace 12 años y que en todo este tiempo el gobierno local no fue capaz de aprobarlo ni tampoco resolver las alegaciones para tranquilidad de los vecinos.
