Los más de 4.500 escolares acudieron provistos de mascarillas FFP2, gafas protectoras y viseras
Más de 4.500 alumnos y casi 600 profesores de los tres municipios más afectados por la erupción en La Palma regresaron ayer a las aulas con ganas de volver a la rutina pese a la lluvia de cenizas y al incómodo sonido de fondo de un volcán que no deja de arrojar lava. En el caso de los alumnos de Tazacorte fue una vuelta efímera, pues la Consejería de Educación suspendió la actividad presencial de nuevo para hoy ante la previsión de que una de las coladas que se adentraron en el barrio de La Laguna acabe llegando al mar. Los estudiantes del CEO Juan XXIII y del CEIP Puerto recibirán sus clases en línea hasta nuevo aviso.
Acudieron a las aulas el 90% del alumnado matriculado en El Paso, Los Llanos y Tazacorte. No en vano, esta vuelta al cole se producía el mismo día que las autoridades aconsejaban a los vecinos de El Paso permanecer en zonas interiores debido a la mala calidad del aire. Más que el ruido del volcán, lo más molesto este día de vuelta al cole fueron las cenizas. María Yenis Rodríguez, directora del CEIP Adamancasis, en El Paso, dijo que están “contentos” porque el 95% del alumnado fue a clase, pese a que “había muchas dudas”. No ha sido sencillo, pues ya desde el primer día tuvieron que aplicar en este centro, a unos 5 kilómetros del volcán, el protocolo de mala calidad del aire. Todos los niños permanecieron confinados en las clases, con las ventanas selladas, y no pudiero ir al recreo ni hacer educación física, que “les encanta”.
MEDIDAS DE PROTECCIÓN
Al salir de clase los alumnos y alumnas fueron provistos con mascarillas FFP2, gafas protectoras y gorras con viseras porque “parece que llueve ceniza” en toda la zona. En cuanto al rugido del volcán, señala que sin niños en el centro “se nota más”, pero con “el bullicio y la algarabía” de los chiquillos no se sintió tanto. La vuelta al cole fue especial para los niños, que tenían “muchas ganas de verse”, pero en especial para los siete que cursaban estudios en la escuela unitaria de Jedey. Sus nuevos compañeros los recibieron con carteles de bienvenida y les hicieron un pasillo para que se sintieran arropados en su nueva día en el centro. Además, y en el marco institucional, la vicepresidenta primera del Gobierno, Nadia Calviño, visitó ayer La Palma, donde concretó que 152 empresas con 758 trabajadores se acogieron a los ERTE específicos por la erupción. Calviño se reunió con representantes del Gobierno de Canarias, Cabildo de La Palma, empresarios y alcaldes de los municipios afectados por la erupción del volcán.
La llegada de la colada al mar obligará a reforzar la protección
La previsible llegada al mar de la colada al suroeste de la Montaña de La Laguna, que se encontraba ayer a 200 metros de la costa, obligará a adoptar nuevas medidas de protección a la población en núcleos costeros de Tazacorte, por posibles explosiones y emanación de gases nocivos. Así consta en el último informe del Departamento de Seguridad Nacional, en el que también se informa de que las coladas del volcán de Cumbre Vieja en la isla de La Palma que presentan mayor carga de energía y aporte de lava son las de las proximidades de La Laguna “que, en estos momentos, y a menor velocidad continúan avanzando en dirección oeste y noroeste”.
Las condiciones meteorológicas, que se mantendrán al menos durante toda la jornada de hoy, empeoran la calidad del aire, aunque “todavía no se han rebasado los valores máximos que exigiría la adopción de nuevas medidas”, según el DSN. El domingo, y debido a la nube de ceniza, las compañías aéreas que operan en la isla de La Palma cancelaron sus operaciones en el aeropuerto.
Según los últimos datos del Instituto Geográfico Nacional, treinta seísmos tuvieron lugar en la isla de La Palma desde la medianoche del domingo, el mayor de 4,6 grados en Villa de Mazo, que pudo ser sentido por la población y tuvo lugar a 36 kilómetros de profundidad. El resto de los seismos registrados la madrugada del lunes en la Palma oscilaron entre los 4,1 grados y 2,3 grados
