Un centenar de niños de tres escuelas infantiles de Valencia serán sometidos entre hoy y mañana en el Hospital La Fe de Valencia a un análisis de sangre para determinar si están afectados por una onicomadesis, un virus que provoca la pérdida de las uñas.
Fuentes de la Conselleria de Sanidad han confirmado que se ha tomado esta decisión tras detectar que once niños están afectados por esta enfermedad vírica que puede haberse contagiado a través del intercambio de juguetes u objetos personales de los menores.
Técnicos de la Dirección General de Salud Pública fueron advertidos la pasada semana de esta situación en al menos tres escuelas infantiles de la zona noroeste de la ciudad de Valencia y tras iniciar una investigación determinaron que, en once casos, se trataba de una onicomadesis.
El pasado viernes celebraron una reunión con los padres de los niños y niñas de las escuelas infantiles a los que comunicaron cual era el problema y las medidas que se iban a adoptar, como análisis de sangre y pruebas dermatológicas.
Las mismas fuentes han señalado que al tratarse de un virus el único tratamiento posible es tópico para la reparación de las uñas, y han indicado que se trata de un problema que remite espontáneamente, no deja secuelas y las uñas vuelven a crecer de forma normal.
Salud Pública ha decidido que un centenar de niños de las escuelas infantiles sean sometidos al análisis sanguíneo para descartar en ellos la presencia del virus, ya que algunos pueden ser portadores aunque aún no lo hayan desarrollado.
La onicomadesis es una infección provocada por un virus y que provoca la muda de las uñas, comenzando en la matriz y volviéndose completa, aunque no tiene otros síntomas.
La Conselleria ha indicado que en principio las escuelas infantiles siguen abierta, ya que el foco del virus son los propios niños y no las instalaciones escolares.
Técnicos de la Dirección General de Salud Pública fueron advertidos la pasada semana de esta situación en al menos tres escuelas infantiles de la zona noroeste de la ciudad de Valencia y tras iniciar una investigación determinaron que, en once casos, se trataba de una onicomadesis.
El pasado viernes celebraron una reunión con los padres de los niños y niñas de las escuelas infantiles a los que comunicaron cual era el problema y las medidas que se iban a adoptar, como análisis de sangre y pruebas dermatológicas.
Las mismas fuentes han señalado que al tratarse de un virus el único tratamiento posible es tópico para la reparación de las uñas, y han indicado que se trata de un problema que remite espontáneamente, no deja secuelas y las uñas vuelven a crecer de forma normal.
Salud Pública ha decidido que un centenar de niños de las escuelas infantiles sean sometidos al análisis sanguíneo para descartar en ellos la presencia del virus, ya que algunos pueden ser portadores aunque aún no lo hayan desarrollado.
La onicomadesis es una infección provocada por un virus y que provoca la muda de las uñas, comenzando en la matriz y volviéndose completa, aunque no tiene otros síntomas.
La Conselleria ha indicado que en principio las escuelas infantiles siguen abierta, ya que el foco del virus son los propios niños y no las instalaciones escolares.
