Casi una de cada tres personas en España está considerada sénior y ese talento debería ser aprovechado por la sociedad en general y el tejido empresarial. Es la principal conclusión del “Mapa del talento sénior”, redactado por la Fundación Mapfre dentro de su proyecto “Ageingnomics”. Hoy en día, la población englobada bajo este término suma más de 15,5 millones de personas; es decir, el 32% de la población.
En las conclusiones del informe, recientemente presentado a nivel estatal, los autores concluyen que “la población sénior tiene capacidad para aportar al mercado laboral y la economía”, puesto que, del total de mayores de 55 años, más de cuatro millones forman parte de la población activa, casi un millón son autónomos y, al menos, 100.000 personas de cuantas superan esta edad son emprendedoras. Las cifras no han hecho más que crecer, por lo que “no solo hay más sénior ocupados en el mercado laboral, sino que se mantienen empleados más años”.
De este modo, la población mayore de 55 años se presenta como un importante activo en términos cualitativos y cuantitativos para la economía española, si bien el informe elaborado por la Fundación Mapfre señala que “más de medio millón, a pesar de que quieren trabajar, no pueden hacerlo”. Y la mitad de los desempleados arrastran esta situación desde hace más de dos años. “Las cifras de parados sénior casi se han triplicado desde 2008”, apuntan las conclusiones del estudio.
EMPRENDIMIENTO
Emprender o trabajar por cuenta propia se ha convertido en la única vía para que muchos sénior en España puedan seguir estando activos. “Las tases de emprendimiento sénior están por debajo de las de otras cohortes de edad y lejos de nuestros pares europeos”, reza el informe. Al mismo tiempo, “se ha detectado una tendencia a abandonar prematuramente el mercado laboral” y, en algunos casos, se produce a una edad tan anticipada que el tiempo de jubilación es igual o incluso superior al de actividad. “Además -prosigue el “Mapa de talento sénior”-, conforme más mayores son los españoles, más probabilidad tienen de estar en regímenes de trabajadores por cuenta propia, ya que es la única forma de seguir trabajando”.
En las conclusiones del informe apuntan también a que esta situación “supone para la economía española una pérdida de oportunidad en términos de riqueza que diferentes estudios internacionales han tasado en varios puntos del PIB”. En este sentido, los autores animan a la sociedad a aprovechar las ventajas que presenta la conocida como “economía plateada”. “En este momento conviene recordar que España tiene las mejores circunstancias para ser el país de referencia en la silver economy por su liderazgo en longevidad, sistema sanitario y de dependencia y apertura al exterior”, concluyen.
La gran “oportunidad” de apostar por una jubilación activa que una trabajo y pensión
Además de realizar una radiografía de la situación a nivel español, desde la Fundación Mapfre también han realizado una serie de recomendaciones para que la Administración afronte reformas que pasen por “hacer viables segundas carreras como autónomos de muchos sénior, después de recibir un salario durante la mayoría o la totalidad de la vida laboral”.
Asimismo, también recuerdan la necesidad de desincentivar las prejubilaciones y la jubilación anticipada y, en su lugar, “promover la jubilación activa para que sean compatibles el trabajo y la pensión”. En este punto, señalan hacia grandes corporaciónes de todo el mundo que han apostado por promover programas de talento sénior y tomarlas como referente, no solo porque puede hacerse, sino porque “también es una oportunidad económica”.
“Los representantes de los trabajadores han de entender, con la nueva pirámide poblacional, que alargar la vida laboral de los seniors no lesiona a los más jóvenes”, apuntan en este “Mapa del talento sénior”, puesto que “no hay suficientes efectivos jóvenes para el relevo generacional y disponer de más séniores trabajando es garantía de mayores ingresos para el estado del bienestar”.
Por último, insisten en la urgencia de concienciar a los propios mayores de 55 años de que “a pesar de lo atractivo que parece un futuro sin trabajo, la realidad indica que una de las mejores formas de envejecer con salud es seguir siendo útil trabajando”. En la misma línea se sitúa la disrupción demográfica, que “hace inviable abandonar el mercado de trabajo cuando quedan por delante más de 30 años de esperanza de vida, por mucha confianza que nos dé el sistema de pensiones que nos hemos dotado”, concluyen los autores que han elaborado este informe para la Fundación Mapfre.
