Una clínica paga 32.000 euros por quemaduras en una depilación

Una clínica de cirugía estética fue condenada por el Juzgado de Primera Instancia número 12 de Málaga a pagar más de 32.000 euros a una mujer por los daños y quemaduras ocasionados por un tratamiento de depilación mediante el sistema de luz pulsada intensa (IPL) al que se sometió entre 2006 y 2008.
La mujer acudió en abril de 2006 -cuando tenía 30 años- a la clínica para someterse a un tratamiento para eliminar el vello corporal. Al término de la fotodepilación, presentó quemaduras de primer y segundo grado en cara anterior y posterior de las piernas y zona abdominal que tardaron casi un año en curar.

En la resolución se indica que la aparición de las quemaduras coincidió con el aumento de intensidad en el tratamiento, 'sin que el argumento de un cambio en la propia evolución del vello o de la piel de la paciente pueda justificar el hecho'.

Te puede interesar