El Instituto Social de la Marina ha desestimado el recurso interpuesto por Rafael Vázquez, un hombre de 34 años de El Rompido (Huelva), contra la resolución del Centro de Sanidad Marítima que lo declaró 'no apto' para el trabajo de marinero por ser tartamudo.
En la resolución, a la que ha tenido acceso Efe, se indica que 'no se puede garantizar que las condiciones psicofísicas del reclamante sean compatibles con las características de su puesto de trabajo y no supongan un peligro para la seguridad y la salud del resto de la tripulación'.
Para desestimar el recurso se alega el 'intenso grado de disfemia' del reclamante y la importancia de la comunicación verbal en las faenas de pesca para prevenir los accidentes.
En este sentido, se apunta que 'si bien los mensajes verbales generados en los procesos productivos deben ser cortos, simples y claros, la secuencia de las operaciones requieren una compleja coordinación'.
El ISM apunta que las condiciones en que se realizan las actividades a bordo en cada momento y la imprevisibilidad de aparición de situaciones de riesgo o emergencia a bordo pueden añadir en el reclamante 'un componente de estrés o ansiedad que puede agravar la dificultad de la elocución del afectado, aumentando el tiempo de reacción del mismo con el consiguiente riesgo para sí mismo y el resto de la tripulación'.
Asimismo, considera que la preparación, conocimiento, sentido de la responsabilidad, resistencia al estrés o autoconfianza, reconocida en informes aportados por Vázquez 'no modifican ninguna de las características básicas de su disfemia' y que aquellos que apoyan su capacidad para trabajar en equipo, apoyar o supervisar a otras personas, 'no pueden servir para determinar la aptitud individual de un trabajador'.
En la resolución también se recoge que la comunicación gestual adecuada del joven 'no puede suplir a la verbal, especialmente en actividades pesqueras que pueden ser realizadas en horario nocturno'.
El hecho de que el reclamante pretenda acceder por primera vez al sector marítimo pesquero, por lo que carece de la experiencia, adaptación y adiestramiento precisos para poder compensar las limitaciones derivadas de su trastorno, es otro de los motivos esgrimidos para ratificar que no es apto.
