La criminóloga y oficial de la Policía Local en Santiago Diana Parente ha situado el nombre de Galicia en la publicación 'Aspectos Criminológicos en materia de Seguridad Vial', un manual pionero a nivel internacional centrado en la Criminología Vial y pensado con el fin de fomentar la prevención.
Los altos índices de siniestralidad vial se perciben como una amenaza para la sociedad en general. En los últimos tiempos ha aumentado la sensibilización ante las conductas que transgreden el cumplimiento de las normas.
"Se está modificando la actitud social, es decir, la percepción subjetiva del riesgo de ser víctima de un delito", explica en una entrevista con Efe Diana Parente, y añade que "estamos en un momento en el que la tolerancia ante estas conductas es "cero", y tanto es así que desde el año 2007 están incluidas en el Código Penal".
La Criminología Vial es, detalla, una disciplina encaminada al estudio y prevención de este tipo de delitos, así como a la resolución de todo conflicto que surja tras un siniestro vial.
Más de 440 páginas distribuidas en 21 capítulos componen esta obra que aborda la casuística, los enfoques multidisciplinares, la perspectiva forense, la problemática social, los atropellos, la criminalización, el papel de las víctimas, y también el tratamiento informativo en los medios de comunicación.
Se trata de un trabajo pionero coordinado por el criminólogo, periodista y policía local Juan Antonio Carreras Espallardo que ya ha sido presentado en el Colegio Libre de Estudios Universitarios CLEU (México), a cargo de uno de sus coautores, Mario Murrieta Fournier.
"No solo es el primer manual en España. Es el primer manual de Criminología Vial que se ha publicado hasta la fecha en todo el mundo y el primero donde se habla de Criminología Vial con todo lo que este aspecto conlleva", expone esta joven agente.
Escrito por una veintena de especialistas en materia de Seguridad Vial y redactado desde la vertiente criminológica, el manual pretende impulsar la Criminología Vial y poner en contacto la Seguridad Vial con el mundo criminológico para ofrecer soluciones hasta ahora desconocidas e incorporar el punto de vista de profesionales en la materia.
Está concebido fundamentalmente para criminólogos, miembros de las fuerzas y cuerpos de seguridad, psicólogos, profesores, personal universitario -docente y alumnado-, y expertos en instituciones relacionadas con la Seguridad Vial.
Los delitos contra la Seguridad Vial que más se cometen en la actualidad, dice Parente, son la conducción bajo la influencia de bebidas alcohólicas y la conducción sin permiso de circulación.
"Aunque hay un delito, el de conducir bajo la influencia de las drogas, que se comete mucho, pero desgraciadamente puede quedar impune porque no todas las policías disponen de los instrumentos materiales y formativos para detectarlo y atajarlo", completa.
Diana Parente, coautora del libro, participa con el capítulo 'La pena de trabajos en beneficio de la comunidad' y estos son, junto con la multa y la prisión, "una de las penas posibles para los condenados por delitos contra la Seguridad Vial. Aquí en Galicia participo en la ejecución de esta pena a través de cursos que desarrolla la Asociación de Criminólogos de la Comunidad".
Con este programa precisamente se han abierto nuevas alternativas a las penas por seguridad vial y con él se pretende generar una predisposición al cambio en las conductas al volante por parte de los condenados, a través de conocimientos, creencias y valores, potenciando un comportamiento responsable.
"Los resultados suelen ser fructíferos y realmente se alcanza esa sensibilización pretendida por los docentes. Me consta que la educación vial es algo importante para la ciudadanía y aquí el Ayuntamiento de Santiago suele colaborar para que estas iniciativas puedan seguir llevándose a cabo en nuestra ciudad", relata.
El propósito es que los destinatarios puedan cumplir la medida judicial sin tener que desplazarse de su ámbito municipal y con los menores perjuicios para su vida familiar, laboral y social, al tiempo que se les sensibiliza de los efectos que sus actos provocan en la sociedad.
"Me parece un aspecto muy positivo -precisa-, ya que pienso que son personas totalmente insertadas en la sociedad y cualquier otro tipo de pena puede ser perjudicial".
¿Y cuál es la meta en general? "Si se implementase una prevención primaria en la que primase la educación vial en todas las esferas de nuestra vida, desde que somos unos niños hasta que dejamos de ser conductores, con la consiguiente educación en las vías de nuestro país, no tendríamos que llegar a conocer el concepto de delincuencia vial", concluye.
