La escuela católica privada St Benedict, en Londres, una de las más selectas del Reino Unido, está siendo investigada por supuestos abusos sexuales por parte de los profesores y religiosos a los alumnos. Un informe reciente de la Inspección Independiente de Escuelas (ISI, en inglés) identificó seis casos de pederastia cometidos por monjes y profesores en esa escuela y en la Abadía Benedictina de Ealing (Londres), asociada al centro educativo, informa el diario británico 'The Times'.
De estos casos, el más sonado es el del párroco David Pearce, de 68 años, que fue encarcelado el pasado octubre por haber abusado sexualmente de seis alumnos, a pesar de vivir durante varios años en el monasterio bajo un régimen restrictivo que le impedía el contacto con los menores. Ante esta situación, los responsables del centro han encargado una investigación interna al abogado Alex Carlile, famoso por colaborar con el Gobierno británico en casos de terrorismo, y se comprometieron a sacar a la luz todos los detalles.
La investigación reveló además casos de abusos cometidos por tres monjes que, al igual que Pearce, impartían clases y a los que se les impuso un régimen de internamiento en el monasterio sin contacto con los niños, por un antiguo profesor con una larga lista de condenas por abusos a menores hasta 2008, y por un monje que se encuentra ahora en el extranjero. Las autoridades ordenaron a St Benedict que si existen sospechas de casos de abuso la prioridad sea la protección del menor, por lo que no deberán investigarse con procedimientos internos, sino que debe encargarse de ello la policía. El director del centro, Anthony Nelson, dijo que las medidas de protección cumplen todos los requisitos.
La investigación reveló además casos de abusos cometidos por tres monjes que, al igual que Pearce, impartían clases y a los que se les impuso un régimen de internamiento en el monasterio sin contacto con los niños, por un antiguo profesor con una larga lista de condenas por abusos a menores hasta 2008, y por un monje que se encuentra ahora en el extranjero. Las autoridades ordenaron a St Benedict que si existen sospechas de casos de abuso la prioridad sea la protección del menor, por lo que no deberán investigarse con procedimientos internos, sino que debe encargarse de ello la policía. El director del centro, Anthony Nelson, dijo que las medidas de protección cumplen todos los requisitos.
