Casi tres cuartas partes de los 35 episodios de contaminación por ozono que se registraron en Galicia entre los años 2002 y 2008 correspondía a focos procedentes de fuera de la Comunidad
Así lo han constatado un equipo multidisciplinar de investigadores de la Universidad de Santiago de Compostela integrado por ingenieros químicos, físicos y químicos en el marco de un proyecto financiado por el Plan Nacional de I+D+i.
Esto significa que en estos casos el foco de contaminación no está en Galicia, sino que el impacto ambiental se genera como consecuencia de los movimientos de masas de aire, señala el profesor Juan José Casares, responsable del proyecto del Grupo de Modelización Ambiental de la USC.
La investigación refleja que la contaminación procede, principalmente, del litoral atlántico gallego-portugués, de la Meseta Central y del Norte de España, mientras que sólo el 26 por ciento tiene su origen en episodios derivados de la actividad en Galicia.
Este estudio incorpora los contaminantes secundarios, que surgen debido a las reacciones que tienen lugar en la atmósfera por las emisiones de otros componentes primarios, como objeto de la investigación.
El ozono (O3) es un gas inodoro e incoloro formado por tres átomos de oxígeno del que existen dos tipos: El ozono estratosférico o bueno, que se encuentra en la atmósfera superior, a una altura de entre 15 y 50 kilómetros, y es beneficioso al formar una capa que nos protege de los efectos nocivos de los rayos solares dañinos al actuar como filtro de la radiación ultravioleta; e el ozono troposférico o malo, situado en la parte baja de la atmósfera, al nivel de la superficie terrestre, que es donde se encuentra el aire que respiramos.
La concentración excesiva de ozono, motivado por la combinación de factores tales como las emisiones de ciertos gases contaminantes (contaminantes precursores) -de ciertas industrias y de los vehículos de motor, por ejemplopuede causar graves transtornos a personas con problemas respiratorios, así como a ancianos y niños, motivo por los que la UE fijo diversos umbrales de alerta a la población.
Esto significa que en estos casos el foco de contaminación no está en Galicia, sino que el impacto ambiental se genera como consecuencia de los movimientos de masas de aire, señala el profesor Juan José Casares, responsable del proyecto del Grupo de Modelización Ambiental de la USC.
La investigación refleja que la contaminación procede, principalmente, del litoral atlántico gallego-portugués, de la Meseta Central y del Norte de España, mientras que sólo el 26 por ciento tiene su origen en episodios derivados de la actividad en Galicia.
Este estudio incorpora los contaminantes secundarios, que surgen debido a las reacciones que tienen lugar en la atmósfera por las emisiones de otros componentes primarios, como objeto de la investigación.
El ozono (O3) es un gas inodoro e incoloro formado por tres átomos de oxígeno del que existen dos tipos: El ozono estratosférico o bueno, que se encuentra en la atmósfera superior, a una altura de entre 15 y 50 kilómetros, y es beneficioso al formar una capa que nos protege de los efectos nocivos de los rayos solares dañinos al actuar como filtro de la radiación ultravioleta; e el ozono troposférico o malo, situado en la parte baja de la atmósfera, al nivel de la superficie terrestre, que es donde se encuentra el aire que respiramos.
La concentración excesiva de ozono, motivado por la combinación de factores tales como las emisiones de ciertos gases contaminantes (contaminantes precursores) -de ciertas industrias y de los vehículos de motor, por ejemplopuede causar graves transtornos a personas con problemas respiratorios, así como a ancianos y niños, motivo por los que la UE fijo diversos umbrales de alerta a la población.
