La Generalitat valenciana informará a las mujeres que acudan a los centros sanitarios con intención de interrumpir su embarazo no sólo de las consecuencias médicas, psicológicas y sociales de su decisión sino también de la 'trascendencia ética' de esta acción.
Para ello, se incorporará a la documentación escrita imágenes sobre el proceso de interrupción voluntaria del embarazo y del de formación de la vida por medio de 'cualquier formato gráfico', como ecografías en 3D. Así lo trasladó ayer la portavoz del Consell valenciano, Paula Sánchez de León, en la rueda de prensa posterior a la reunión del pleno del Gobierno valenciano, que tomó una serie de decisiones para evitar 'las situaciones y los problemas técnicos' que se pueden suscitar como consecuencia de la aplicación de la nueva ley de Salud Sexual e Interrupción Voluntaria del Embarazo.
La también consejera de Justicia enmarcó esta medida en el artículo 17.4 de la Ley del Aborto, que prevé el derecho a la información con carácter previo al consentimiento, y resaltó que la ley tiene 'importantes problemas técnicos en su aplicación' que hay que resolver, lo que les ha llevado a adoptar iniciativas.
Además, se creará un Comité de expertos, que analizará y redactará la normativa autonómica necesaria para la aplicación y 'la ampliación' del derecho a la objeción de conciencia.
La también consejera de Justicia enmarcó esta medida en el artículo 17.4 de la Ley del Aborto, que prevé el derecho a la información con carácter previo al consentimiento, y resaltó que la ley tiene 'importantes problemas técnicos en su aplicación' que hay que resolver, lo que les ha llevado a adoptar iniciativas.
Además, se creará un Comité de expertos, que analizará y redactará la normativa autonómica necesaria para la aplicación y 'la ampliación' del derecho a la objeción de conciencia.
