El yodo, imprescindible en la dieta

Se aconseja que la dieta diaria contenga de 2 a 3 raciones de lácteos al día para tener un buen aporte de yodo

Beatriz Colmenero (Ourense) pregunta: ¿Cuáles son las cantidades recomendadas de yodo que debe aportar la dieta? Se recomienda la sal yodada?

Las necesidades diarias de yodo están alrededor de 150 microgramos en la población adulta, 90-120 microgramos en la población infantil y 250 microgramos en mujeres gestantes o que amamantan. EFSA (Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria)

Para cubrir estos requerimientos, es fundamental que la dieta habitual contenga  alimentos ricos en yodo como la sal yodada, lácteos y pescado, entre otros.

El yodo es un componente esencial para el organismo pues forma parte de las hormonas tiroideas, encargadas de regular el metabolismo basal, el crecimiento de los huesos largos, la maduración de las neuronas y los procesos enzimáticos y metabólicos del cuerpo. 

La ingesta adecuada de yodo es imprescindible para la síntesis de las hormonas tiroideas y por lo tanto para el correcto funcionamiento del cuerpo humano. Los trastornos tanto por déficit como por exceso de yodo tienen consecuencias importantes en la población, aunque de estos dos el más frecuente ha sido el déficit de yodo (bocio endémico, alteraciones desarrollo neurológico, etc.)

Por fortuna, en España la concentración de yodo de la sal yodada es de las más elevadas de Europa (60 microgramos de yodo en cada gramo de sal), por lo que consumiendo poca sal basta para cubrir las necesidades de yodo diarias en la mayoría de las personas.

Otros alimentos como los lácteos, especialmente la leche, contribuye con una cantidad importante de yodo. Un vaso de leche aporta de media 50 microgramos de yoduro. El contenido de yodo de las bebidas vegetales es un 2% comparado con el que contiene la leche de vaca. 

Otra de las fuentes principales del aporte de yodo es el pescado. Los productos marinos (pescados, mariscos, algas), exceptuando la sal marina, son los que contienen yodo en mayor proporción.

En la última década se ha mejorado notablemente la ingesta de yodo en España, con cantidades por encima de los 100 microgramos día. El factor que parece haber influido más en ello, se centra en el consumo voluntario de sal yodada y la contribución de los alimentos lácteos (leche, yogurt y quesos con aportes medios de 250 microgramos/día). No obstante, aunque en la dieta de las mujeres embarazadas y lactantes este nutriente también se ha corregido, el aporte sigue alejado de los valores deseables. 

En España, se recomienda un consumo universal de sal yodada. En la mujer embarazada y lactante las necesidades aumentan y no son garantizadas suficientemente con el consumo de alimentos enriquecidos con yodo, por lo que sería necesario utilizar un suplemento extra de yodo en forma de yoduro potásico hasta alcanzar los requerimientos. Estos comprimidos habitualmente contienen entre 100 y 200 microgramos de yodo.


Envíe sus dudas a: [email protected]

Te puede interesar