La asamblea de Conductores Asociados de Valdeorras (Coasva), que preside Joaquín Tato Vidal, reclamará la mejora de la señalización del desvío de la carretera N-120. La infraestructura lleva cerrada al tráfico desde el pasado 26 de septiembre y continuará hasta la Navidad, según el Ministerio de Fomento, a causa de las grietas surgidas en la pérgola exterior del túnel de La Barosa (León).
Los chóferes acordaron aplazar la convocatoria de movilizaciones hasta diciembre, una posibilidad que manejaron hasta el último momento. Pese a ello, decidieron pedir que se permita circular por la N-120 a los camiones que viajan entre O Barco y Rubiá, algo que no pueden hacer ahora. Una señal de dirección prohibida colocada en el acceso impide circular hacia Rubiá, prohibición que obvian muchos turismos.
Otra reclamación de los conductores valdeorreses va dirigida a solicitar el arreglo de la carretera N-536 una vez que deje de pasar por ella el tráfico desviado de la N-120. Los chóferes explican que el aumento del número de vehículos está deteriorando considerablemente el firme. 'Cada vez hai máis baches', dijo Joaquín Tato.
La cita fue aprovechada por los socios de Coasva para fijar la fecha de la tradicional cena de Navidad, que será el próximo 22 de diciembre y que coincidirá con las fechas anunciadas para la reapertura de la N-120.
Otra reclamación de los conductores valdeorreses va dirigida a solicitar el arreglo de la carretera N-536 una vez que deje de pasar por ella el tráfico desviado de la N-120. Los chóferes explican que el aumento del número de vehículos está deteriorando considerablemente el firme. 'Cada vez hai máis baches', dijo Joaquín Tato.
La cita fue aprovechada por los socios de Coasva para fijar la fecha de la tradicional cena de Navidad, que será el próximo 22 de diciembre y que coincidirá con las fechas anunciadas para la reapertura de la N-120.
