Una chilena intenta encontrar en O Barco el rastro de sus abuelos

La chilena Mónica Ibáñez, ante el juzgado de O Barco (Foto: L.B.)
Hace casi un siglo, mientras su mujer cogía un barco hacia Chile, Francisco Ibáñez Porras se tuvo que quedar en Valdeorras trabajando en las viñas. Era el año 1916 y el matrimonio nunca volvió a reunirse. Ahora, su nieta, Mónica Ibáñez Parra, viajó desde el continente americano hasta O Barco para reencontrarse con sus orígenes. 'Siempre tuve la necesidad de conocer algo de mi abuela, con quien estuve muy unida', dijo.
Mónica Ibáñez llegó a la villa barquense desde Santiago de Compostela buscando la huella de su familia. Después de preguntar en el Concello, se dirigió al Registro Civil, requiriendo su ayuda para buscar la identidad de sus posibles parientes ourensanos.

Momentos antes de emprender el camino de regreso a su país, esta chilena confía en que el origen catalán del apellido de su abuela pueda facilitar la localización de su familia gallega y solicita ayuda para dar con ella. El único dato que recuerda de su abuelo es su detención en tiempos de la guerra civil española.

Nada más abandonar las instalaciones judiciales, Mónica Ibáñez dijo que posee una escuela en Chile, que está subvencionada por el Gobierno. Se trata de la Escuela Nuestra Señora de Montserrat y en sus aulas se desarrollan actividades relacionadas con el aprendizaje del lenguaje y con la integración de personas que sufren de autismo.
Durante su breve estancia en la villa barquense, resaltó la buena situación económica que atraviesa el país chileno. En este sentido, dijo que 'vivimos bien, cómodos. Allí, la crisis no llegó'.

Te puede interesar