POLÉMICA

Un conflicto entre pizarreras y comuneros amenaza el empleo

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photo_camera Cadenas colocadas en una pista utilizada por las canteras de pizarra en O Trigal-Portela.

La Comunidad de Montes de Portela y Trigal cierra con cadenas una pista que utilizan tres canteras

La amenaza de pérdida de empleos preocupa en las empresas que se vieron envueltas en el conflicto con la Comunidad de Montes Vecinales en Mano Común de Portela y Trigal. Hace más de un mes que sus vecinos cerraron con cadenas la principal salida de la pizarra de Emeritasa y Carucedo -25 trabajadores y del mismo grupo- e Intradima (más de 20 perarios). Desde entonces, llevan la roca por pistas alternativas, con unas distancias que son más del doble que las anteriores y con el consiguiente encarecimiento de los costes.

"Llegará un momento en que no se podrán aguantar los costes y habrá que cerrar", apuntaron fuentes de Emeritasa. En esta cantera también incidieron en el peligro que supone para los conductores usar pistas que hasta hace unas semanas no eran habituales y que sea cerrada la que fue asignada para las emergencias en los planes de labores. "Si ocurre algo, está cerrada", afirmaron las mismas fuentes.

En Emeritasa afirman que la pista es pública y que la explotación utiliza montes arrendados a Casoio. Los vecinos de Portela y Trigal consideran que el vial es particular y piden a esta cantera 30.000 euros anuales por utilizarla y otros 90.000 para trabajar.

Asimismo, proponen negociar con otra pizarrera el arrendamiento del terreno que le alquilaron los pueblos, que deben dar el visto bueno, según su abogado: José Antonio Iglesias. Añadió que los 90.000 euros corresponden a los atrasos.

La petición a explotaciónIntradima es de 30.000 euros anuales por la utilización de la pista que usaba para sacar la pizarra. "Están jugando con la empresa y los puestos de trabajo", afirmaron en la industria.

El conflicto ya se encuentra en el Juzgado de O Barco de Valdeorras. Aquí, también se encuentra el recurso presentado por el grupo Samaca, Irosa y Pizarras Trevinca, después de que los vecinos presentasen una demanda de desahucio y lanzamiento. En este caso por el alquiler de terrenos, no por usar las pistas.

“Si cierran es por otras circunstancias"

Las pizarreras lamentan el estancamiento del conflicto y la lentitud con la que avanzan las acciones emprendidas buscando una solución. Sus quejas no son compartidas por José Antonio Iglesias, abogado de la Comunidad de Montes Vecinales en Man Común de Portela y Trigal, que preside José Antonio Valle. "Si cierran es por otras circunstancias. Que no digan que son los arrendamientos. Están pagando tres veces más que la renta por salir por otro sitio. Es cabezonería. Si no son viables sus explotaciones, que cierren cuanto antes. Cada uno es responsable de sus decisiones", afirmó. A su vez, las empresas critican la falta de diálogo y el uso de las cadenas como "coacción" en su reclamación de los arrendamientos. "Nosotros estamos abiertos a todo. No queremos fastidiar a nadie", se defendió José Antonio Iglesias.

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