Los empresarios critican la situación de abandono del sector por las administraciones

Un consorcio busca impulsar el sector turístico valdeorrés

El río Sil, a su paso por la villa barquense. (Foto: J.C.)
La promoción del turismo en Valdeorras recibió ayer el espaldarazo de la Xunta, con su aprobación de los estatutos del Consorcio Turístico de Valdeorras, en el que participan sus nueve concellos: O Barco, O Bolo, Carballeda, Larouco, Petín, A Rúa, Rubiá, Vilamartín y A Veiga. Sus alcaldes serán convocados en un plazo de un mes para constituir la asamblea y poner en marcha un proyecto iniciado en abril del 2008.
Los primeros pasos del Consorcio estarán encaminados a conseguir el plan director que diga por dónde debe ir el sector turístico valdeorrés. Los alcaldes promotores confían en obtener financiación de la Administración autonómica y en esta dirección apunta la solicitud de 40.000 euros a las ayudas orientadas al turismo que convocó a principios de año el programa Agader, dependiente de la Consellería de Medio Rural. La petición fue cursada en febrero y, a día de hoy, los firmantes desconocen qué respuesta obtuvo. 'Non sabemos nada', confirmó el alcalde de A Rúa, Luis Fernández Gudiña.

En todo caso, los alcaldes insistirán ante la Xunta en busca de la financiación solicitada. Lo apuntó el alcalde de O Barco, Alfredo García Rodríguez, quien seguidamente explicó que 'Madrid exige tener el plan director para otorgar subvenciones para las actuaciones'.

El citado plan director deberá incluir un detenido estudio de la comarca, que deberá recoger sus recursos turísticos.

La promoción turística gusta a los hosteleros. Antonio Fernández 'Cholo' codirige 'O Trisquel', un negocio de turismo rural en Vilanova (A Veiga). 'El turismo está totalmente desaprovechado; sobre todo en el ámbito de la naturaleza. El potencial es tremendo y habría que hablar de industria', dijo.

El potencial natural de parajes como Trevinca no pasa desapercibido para nadie. No obstante, los empresarios hablan de emplear el sentido común a la hora de emplear los recursos económicos. Pretenden evitar 'pifias' como la gran ruta de senderismo de Trevinca, una senda de 180 kilómetros que costó 301.333 euros y que fue el proyecto estrella del Leader Plus Trevinca. Finalizada hace más de tres años, en la actualidad está totalmente abandonada, destrozada y sin homologar. 'Esta senda tendría que ser productiva', dijo Antonio Fernández.

'Por Dios! Qué pongan a andar el turismo en Valdeorras', exclama Montserrat Rodríguez, gerente del Pazo do Castro (O Barco). La empresaria barquense resalta la carencia de una oficina de turismo comarcal e incluso una web, a pesar del potencial de Trevinca o el río Sil. 'Tenemos el parque natural abandonado', protestó.

Te puede interesar