El Seprona investigará el origen de los vertidos arrastrados al río Sil

La contaminación tiñó de gris el arroyo Cigüeño

El arroyo Cigüeño, el viernes.
Las aguas del arroyo Cigüeño se fluyeron teñidas de gris en la tarde del viernes.
Este color fue observado con preocupación por los vecinos de la avenida de la Diputación y por muchos padres y alumnos del colegio ubicado en la avenida del Bierzo de O Barco. No es la primera vez que la tonalidad grisácea, similar a la de la pizarra, llama la atención acerca de una situación anormal en el tramo barquense del cauce y coincidió, al igual que en ocasiones anteriores, en una tarde de viernes. Esta situación se prolongó durante algo más de una hora, recuperando la apariencia anterior, posiblemente cuando las partículas arrastradas desembocaron en el río Sil.

La alarma de los vecinos llegó hasta la Policía Local de O Barco, que inmediatamente puso sobre aviso a los agentes del Servicio de Protección de la Naturaleza 'Seprona', de la Guardia Civil de Trives. Sus agentes abrirán una investigación para esclarecer la causa de la extraña turbiedad del agua. En un principio, no se descarta que los arrastres tengan su origen en el vecino municipio de Rubiá, aguas arriba del arroyo que cruza el centro de la villa barquense para desembocar en el Sil, a la altura del Paseo del Malecón.


EXPEDIENTE

Esta contaminación afectó a un maltratado arroyo, que provocó la apertura de un expediente sancionador de la Confederación Hidrográfica Miño-Sil contra la Consellería de Medio Ambiente. Fue incoado después de que la Asociación para a Defensa Ecolóxica de Galicia 'Adega' denunciase las obras realizadas en un tramo de cauce. El proyecto fue redactado por el anterior Ejecutivo autonómico, que recurrió al hormigón y a la pizarra para cubrir el lecho de tierra, eliminando así cualquier rastro de vida. 'Aínda non deu a resolución', indicó ayer un dirigente del colectivo ecologista, refiriéndose al citado expediente.

Te puede interesar