Son muchas las personas que se acercan por cualquier gestión y se encuentran con la puerta cerrada
La oficina del Servicio Municipal de Aguas de O Barco, que gestiona el Consorcio de Augas de Valdeorras, generó un buen número de críticas vecinales a lo largo de los últimos días. Son muchas las personas que se acercan por cualquier gestión y se encuentran con la puerta cerrada. En más de una ocasión, tuvieron que volver hasta un par de veces más para poder ser atendidas.
Ayer, en la puerta de la oficina podía leerse un papel con el siguiente texto: "Temporalmente, por reajuste horario de la jornada laboral, está oficina abrirá los siguientes días: -3 y 5 de marzo. -10, 11 y 13 de marzo. Disculpen las molestias". Hace días, permanecía cerrada sin ningún cartel informativo, lo que provocó numerosas molestias y quejas a los usuarios.
El alcalde de O Barco, Alfredo García Rodríguez, argumentó que el cierre de la oficina fue propiciado por la ausencia por razones personales de la trabajadora que atiende el servicio. Explicó que, al gestionarlo el Consorcio de Augas de Valdeorras, que forman los concellos, Augas de Galicia y Diputación, la sustitución debería realizarse mediante un concurso público, lo que demoraría en exceso la vuelta a la normalidad. El regidor indicó que el organismo encontró una solución provisional para abrir martes, miércoles y jueves, en tanto no se reincorpora la empleada.
