El alcalde de O Barco quiere seguir colaborando con la asociación de discapacitados psíquicos

La planta de compost abrirá después de un año de cierre

Recinto de la planta de compostaje, en O Barco.
Un equipo de trabajadores se ocupó estos días de las labores de limpieza de la planta de compostaje de O Campiño, en O Barco. Estos trabajos buscan ponerla a punto para retomar la elaboración de compost (abono vegetal) con los residuos procedentes de la próxima poda de las zonas verdes del municipio, según dijo ayer el alcalde, Alfredo García. Estas labores fueron acometidas después de que la Asociación de Familiares de Discapacitados Psíquicos (Asfaval), que se ocupaba de la fabricación y venta del compost, suspendiese estas labores hace casi un año.
La directiva del colectivo que preside María José Conde tomó la decisión de suprimir la fabricación y distribución de compost a causa de la ausencia de un convenio para regularizar la relación con el Concello. Esta circunstancia, sumada a la falta de unos ingresos muy necesarios para la asociación de discapacitados, desembocó en el abandono de los trabajos.

Estas diferencias podrían desaparecer en las próximas semanas, después de que el alcalde mostrase intención de 'seguir colaborando con Asfaval'. Alfredo García confirmó la posibilidad de que un convenio regule la relación con el colectivo de discapacitados, aunque añadió que el equipo de gobierno aún está pendiente de ultimar el proyecto de explotación de la planta de O Campiño.

La presidenta de Asfaval, María José Conde, afirmó que el colectivo está muy interesado en volver a trabajar en la planta, 'si hay un contrato firmado'. La reanudación de esta colaboración aliviará los problemas económicos de la asociación, que está a la espera de un plan de viabilidad para continuar su labor. En estos momentos, los esfuerzos de la directiva permitieron contratar a cuatro personas, que deben multiplicarse para atender a 21 discapacitados psíquicos de todo el oriente provincial. En su labor, cuentan con el apoyo de un grupo de voluntarios.

El alcalde barquense añadió que los residuos acumulados durante los últimos meses serán triturados para elaborar compost. A pesar de ello, el equipo de Alfredo García aún sopesa la fórmula más adecuda para gestionar la planta y dar salida al abono vegetal que antes vendían los alumnos de Asfaval.

Las instalaciones fueron inauguradas en enero de 2008, y en su construcción la Xunta invirtió 235.681 euros.

Te puede interesar