Los problemas de la empresa que comenzó a construir el nuevo vertedero de inertes rues obligaron a la Xunta a retirar la obra a Indeza y adjudicar su remate. También contratará una compactadora para dejar espacio libre en el actual basurero.
Las obras del nuevo vertedero de inertes de A Rúa llevan tiempo paralizadas. Lo apuntaron en el Concello, donde añadieron que los problemas que atraviesa la adjudicataria de la obra, Indeza, provocaron la suspensión de los trabajos. Esta situación la desbloqueó el vicepresidente del Parlamento gallego, José Manuel Baltar, en la reunión que mantuvo con Justo de Benito, secretario xeral de Medio Ambiente de la Xunta. A la cita también acudieron los concejales rueses del PPdeG Avelino García y Antonio Bello.
En la reunión, que se desarrolló en Santiago, Justo de Benito adquirió o compromiso do executivo autonómico da posta en funcionamento do novo vertedeiro de A Rúa no derradeiro trimestre de 2009, según apuntaron fuentes populares.
Para ello, la Xunta debe retirar la obra a su actual adjudicataria y entregársela a otra empresa para que finalice los trabajos.
Mientras, los residuos deberán seguir siendo depositados en el vertedero actual, que está saturado, en buena parte por los desechos de la fábrica de complementos de automoción Rieter Saifa Noroeste.
Para paliar la situación, la representación que encabezó José Manuel Baltar solicitó la instalación de una compactadora en el actual vertedero. La misión de esta máquina será reducir el volumen de los residuos de la citada empresa y permitir que el recinto pueda seguir siendo usado. El secretario xeral se comprometió a realizar las gestiones precisas.
El nuevo vertedero de A Rúa ocupa 27.136 metros cuadrados y costará 552.666 euros.
En la reunión, que se desarrolló en Santiago, Justo de Benito adquirió o compromiso do executivo autonómico da posta en funcionamento do novo vertedeiro de A Rúa no derradeiro trimestre de 2009, según apuntaron fuentes populares.
Para ello, la Xunta debe retirar la obra a su actual adjudicataria y entregársela a otra empresa para que finalice los trabajos.
Mientras, los residuos deberán seguir siendo depositados en el vertedero actual, que está saturado, en buena parte por los desechos de la fábrica de complementos de automoción Rieter Saifa Noroeste.
Para paliar la situación, la representación que encabezó José Manuel Baltar solicitó la instalación de una compactadora en el actual vertedero. La misión de esta máquina será reducir el volumen de los residuos de la citada empresa y permitir que el recinto pueda seguir siendo usado. El secretario xeral se comprometió a realizar las gestiones precisas.
El nuevo vertedero de A Rúa ocupa 27.136 metros cuadrados y costará 552.666 euros.
